Nos faltaba un perfil de Brian. La gran sorpresa del verano. Ha llevado el dorsal «20», la pisa como si estuviera jugando al futbol sala, tiene un gran primer toque y golpea muy seco. Si tiene que recordarnos a alguien, sería a Deco.

Jona Dos Santos (1990). Jugador que ha tenido una enorme progresión en las dos últimas temporadas. Cuando su hermano Giovani subió al primer equipo, era un jugador poco sacrificado y bastante plano, que se limitaba a vivir de su excelente toque de balón. Su mejoría viene por varios aspectos, como son el posicionamiento táctico, la implicación e intervenciones en el partido, muchas más continuadas ahora, y su paso adelante en el aspecto defensivo.

Técnicamente, tiene el sello de La Masía, jugando a pocos toques y, en su caso, evitando conducir demasiado. Un guante en los saques a balón parado que antes de pensar en el primer equipo debería hacerse con un papel importante este año en el filial (Thiago estará delante de él, es de suponer).