LAS CUENTAS DE PEP EN LA RETAGUARDIA

Subinspector Gallagher nos habla del «fichaje de casa» para la retaguardia culé. 

A falta de cerrar el fichaje de Cesc, y tras la salida de Jeffren y la de Milito –todavía no confirmada-, la plantilla de este año es a priori una de las más compensadas de los últimos años. 


Donde parece q existe algún hueco es en defensa. Hay 9 jugadores –Alves, Adriano, Piqué, Puyol, Fontàs, Abidal, Maxwell, Busquets y Mascherano- para 5 puestos –a saber, los 4 defensas más el pivote defensivo-. Ese hueco no es preocupante porque como ya se demostró el año pasado tanto Abidal como Mascherano son capaces e jugar en el eje defensivo a un nivel top.


Guardiola está probando esta pretemporada, en parte obligado por las cisrcunstancias, a Keita de pivote defensivo, lo que podría implicar un movimiento de piezas pasando Mascherano a la defensa, y completando el bloque de 10 jugadores para 5 puestos… pero entonces el hueco está en la delantera.


Guardiola tiene soluciones para todo. Y cuando hablo de soluciones no me refiero a parches, si no a posibilidades, a jugadores de futuro que poco a poco se han de ir abriendo paso en el primer equipo. El año pasado ya se habló del concepto de Barça B como ‘desplegable’ del primer equipo, y como quedó demostrado con Thiago y Fontàs es una solución óptima, que además alimenta el modelo de cantera.


Este año les va a tocar demostrar que tienen el nivel para quedarse en la primera plantilla a Montoya y Bartra, que van a pelear por cubrir ese hueco defensivo al que aludía anteriormente. Montoya, lateral diestro de largo recorrido y con un gran podería físico, y Bartra, central ‘made in Masía’ con una buena planta y una soberbia salida de balón, están en lo que Marti Perarnau llama la Fase 3 de formación previa a dar el salto a la primera plantilla, una fase que se caracteriza por ser líderes en el Barça B en Segunda División, e ir haciendo el ascensor con el primer equipo. Un dato interesante es que ambos ya saben lo q es jugar en el primer equipo.


A priori el que parece más listo es Martí Montoya (1991), pero paradójicamente es el que lo tiene más difícil ya que su plaza en el primer equipo está ocupada por el Monstruo Alves, que lo juega todo. Se le quiere probar en el lateral zurdo, se le quiere hacer más polivalente para que pueda jugar más minutos, y de paso cubrir una posición que cuando Abidal juegue de central quedara como la más débil del equipo. Un detalle significativo es que este verano ha podido salir con destino a varios equipos dispuestos a pagar su cláusula, pero Pep ha frenado su marcha. Lo quiere cerca.


El otro defensa que este año ha de dar un paso adelante es Marc Bartra (1991). Él y Sergi Gómez son el motivo principal por el que ni Pep ni Tito quieren fichar a otro central. Bartra está todavía un poco tierno defensivamente, es poco contundente. Pero la mejor manera de endurecerse es ir acumulando experiencia al más alto nivel. Jugar al lado de Piqué o Puyol le hará crecer.