Por Rafael Castillo, Szakach


Es Italia, un país con un 87,8% de población católica y que alberga en sus entrañas la Santa Sede, a tan solo unos 500 km de Milán y a día de hoy, de trono vacante tras la renuncia de Joseph Ratzinger. Lugar de fuertes costumbres arraigadas, Italia es también país epicúreo por excelencia, donde la búsqueda del placer culmina con facilidad. ya sea gracias a su excelente comida o a los elegantes y atractivos hombres y mujeres que pueblan sus ciudades. Si uno quiere escapar del pecado, sin duda Milan no es el mejor lugar para hacerlo.

El Fútbol Club Barcelona no lo entendió, y 24 horas después del peor partido de la temporada, es hora de hacer autocrítica. No será este redactor quien eleve los pecados cometidos por el Barcelona en un partido concreto a nivel de categoría, pero es labor de todo el Barcelonismo, buscar soluciones a nuestros problemas sin excederse en el desencanto y buscando un pragmatismo que pueda volver a alzarnos en busca de ideales mas elevados.

1. INIESTA FAVORECE LA PRESIÓN

Como ya comentabamos en el análisis del partido de copa frente al Real Madrid la posición de Iniesta como falso extremo tiene una doble cara. Por una parte, favorece la creación de espacios a la espalda del lateral, que habitualmente son aprovechados con éxito, especialmente en los partidos del Camp Nou, por Jordi Alba. En la cara opuesta, si estos espacios no se aprovechan, el vuelco constante de Iniesta hacia la zona central de creación no hace sino, aumentar la linea de presión del equipo rival. En la imagen podemos ver la escandalosa altura a la que se les permite presionar al mismo tiempo a Abate y Zapata debido a la ausencia de amenazas.

2. NO SE ENCUENTRA LA SALIDA EN CORTO

En una reciente entrevista de Xavi para la Federación Catalana de Fútbol, el jugador de Tarrasa explicaba como con Guardiola empezaron a utilizar al portero para la creación de ventajas en la salida de la pelota. Y bien es cierto que en ocasiones Victor Valdés ha llegado a parecer un líbero en la gestación de la jugada durante estos últimos años. Sin embargo, por decisión propia, indicaciones técnicas o debido al miedo a cometer errores llamativos, este año se esta viendo a un Valdés mucho menos participativo en la combinación, y que no duda en lanzar el balón en largo. El balón en largo es con el 11 de gala del FCB, un balón perdido en la mayor parte de los casos. La falta del primer gol del Milán fue obligada, tras una pérdida resultado de uno de estos citados pelotazos. A día de hoy prácticamente todos los equipos imposibilitan al Barcelona sacar de puerta en corto, y debe ser un problema a solucionar.

3. DISTANCIA ENTRE CENTRALES

No fue la apropiada durante la mayor parte del partido, una mayor distancia entre centrales, favorece la salida de los laterales con mayor facilidad, asi como la salida en conducción del propio central.

4. SIN OPCIONES VERTICALES, EL JUEGO SE HACE HORIZONTAL

La inexistencia de un delantero centro no solo impidió el pase y avance vertical del equipo, sino que también hizo desaparecer la posibilidad de intentar paredes y combinaciones interiores. El juego  en definitiva se vió obligado a volverse horizontal, dada la dificultad de arrancar con la pelota en los pies contra cuatro defensores rivales.

5. NO SE BUSCÓ EL DESEQUILIBRIO EN EL 1 CONTRA 1

Con la disposición de ambos equipos, tan complicado era regatear y desequilibrar por dentro, que ni Leo Messi ni Andrés Iniesta (dos de los mejores del mundo en esta tarea) fueron capaces de conseguirlo, en la banda si que pudimos ver en multitud de ocasiones, situaciones de 1 vs 1 no aprovechadas. El desborde en banda no tiene porque ser visto tan solo como arma para la búsqueda de un centro. La conquista de la línea de fondo permite a los interiores recibir mucho mas cerca de la frontal del área que si el pase atrás se produce desde una posición más adelantada. Constantemente vimos como salvo durante los minutos en que Messi actuó en la derecha, nadie se atrevió a desbordar.


6. XAVI SE METE DONDE NO DEBE

Hablado está ya de sobra el mal partido de ayer de Xavi Hernandez, con tan solo un 79% de pases acertados (suficiente para cualquier jugador, poco para él) y 25 errores en dichas entregas. Sin embargo, el error técnico no fue el único que cometió, ya que su posicionamiento táctico no ayudó al equipo. Es posible que Xavi baje en busca de la pelota porque le gusta, o porque siendo quien es, quiere tirar del equipo y echárselo a la espalda. Sin embargo ayer solo consiguió meterse en zonas que entre los centrales y Busquets deberían dominar con facilidad, dificultando en definitiva, el posicionamiento táctico del equipo, obligando a bajar a Messi a acudir a la que debía ser la posición del propio Hernandez.

7. MAL POSICIONAMIENTO GENERAL
La falta de opciones por delante de la pelota fue más que llamativa, los jugadores iban apareciendo uno a uno hacia la base de la jugada, con la idea en mente de que si no se podía sacar el balón con facilidad, la mejor opción era acercarse a él y ofrecer una ayuda a su compañero. El resultado final de esta concatenación de errores fue que el Barcelona se encontró con multitud de jugadores situados cerca de la pelota, lo que favorecía todavía más la labor de los italianos.

Las superioridades deben conseguirse en la línea por delante del balón, concepto que olvida el Barça de manera habitual. La superioridad en la siguiente linea, si bien conlleva ciertos riesgos, proporciona opciones de pase vertical y de esta manera la posibilidad de acercarse un poco más a la portería rival.
8. NO SE CARGÓ EL ÁREA RIVAL

La consecuencia de todo lo citado fue que los jugadores acabaron lejos del área, de manera que esta no se cargó con jugadores que pudiesen optar a un remate o a cualquier clase de finalización de las jugadas.


Esta falta de amenazas permitió a este Milán, que no es precisamente el mejor equipo defensivo de la historia, plegarse cómodamente en un 451. Adelantó su defensa debido a la carencia de efectivos blaugrana inquietantes, mientras que sus centrocampistas, con las espaldas tranquilas, podían defender hacia delante, preocupados solo de las coberturas y de la presión sobre el balón, cuajando casi todos ellos, un partido destacado.


9. DÉBILES EN LA PRESIÓN

Por último, de nuevo vimos como el equipo rival podía intentar salir con la pelota tocada en raso si se lo proponía, la presión ante el inicio de jugada del adversario continúa siendo tímida y un tanto desordenada.

10. SIN ALTERNATIVAS A TIEMPO

Jordi Roura y su equipo técnico no fueron quienes de ver los problemas que planteaba el partido, ni antes ni durante el mismo. De nuevo, la única alternativa fue la salida al campo de Alexis con ordenes de picar desde el costado hacia la punta de ataque, pero el chileno es un despropósito y esperar que cambie el partido, a día de hoy es hacerle cantos al Sol. 
Durante los últimos minutos y ya volcados se vió al mejor Barça del partido, lo cual es todo un halo de esperanza para el partido de vuelta en el Camp Nou. Se probó con Pedro en la izquierda (por fin) donde acostumbra a deslumbrar con España y aumentar sus registros anotadores. Sumando además en ocasiones (quien sabe si por decisión suya o por decisión técnica) a Piqué a la punta del ataque, colocando a Sergio Busquets como falso central. 
Existen muchas variantes con esta plantilla. Pedro puede jugar en la izquierda, Cesc en punta, Messi en el extremo, se puede jugar con 3 o con 4 defensas, con un central o con Busquets de libre, con Xavi o con Thiago, con 6 centrocampistas, con Alexis o Villa como nueves… Lo que desde luego no se puede hacer, es estar mirando al campo durante 80 minutos como casi se pierde un título y no buscar soluciones específicas, no es digno de un entrenador de élite. Desde este palco, se lleva el abucheo.