EL DÍA QUE NO COMPRENDÍ A GERARDO

Partido post Champions en un escenario en el que no se ha ganado en Liga en los últimos cuatro años. A priori no era un sábado sabadete facilón. La segunda salida más complicada de las que restaban; tan sólo superada en dificultad por la de Chamartín. Sencillo decirlo hoy, pero si era que “no habrá tantas rotaciones” desde luego, en Anoeta, menos. Esta era la tesitura y el Tata acaba la fecha muy mal parado. Si bien hasta ahora me resultaba coherente -aunque muy conservador- hoy dejé de comprenderle.

Comenzando por la triple rotación en defensa. Demasiado para un equipo que aún no sabe defender sin balón. Que no sabe dónde ni cuando hacerlo. Que desconoce a que altura ejecutar. Que vive de individualidades rayando a un nivel altísimo como Sergio o Gerard. Que el día que bajan del notable alto se corre el riesgo de que te pinten la cara o te mojen la oreja.

Tampoco entiendo que quiere de Song. Ni siquiera por qué le quiere… si es que le quiere. Ni creo que lo sepan ninguno de los dos. Comparto que se utilice a Busi como interior derecho, aunque desconozco por qué hoy… Llevo mucho tiempo pensando que eso es el futuro. Por talento, liderazgo, capacidad, forma de defender, rango de pases, regularidad, experiencia, manejo de balón, jerarquía y todo un muestrario de capacidades que no deja de crecer. Sergio es el futuro del centro del campo y es la apuesta clara desde hace ya mucho (más aún con Thiago fuera). Ni Cesc, ni Gundoganes ni Sergi Robertos.

Y Busi fue de lo mejor del partido culé, por cierto. Pero hay que ubicar a su espalda a un mediocentro. Y el Barça tiene a uno -hoy en el banquillo- que es top5. Respeto a los que recelan de cambiar lo que funciona: Supongo que se quedan con el Messi 1.0, aquel extremo derecho individualista. Pero sigamos, de “5” jugó Alex: Alargó al equipo en defensa, cometió errores con balón y, eso sí, hizo valer sus centímetros para marcar a centro lateral de un Canales titular hoy. 90 minutos más para sembrar dudas alrededor del camerunés. Y una sola certeza, sobra.

Iniesta era el tercero en el centro del campo. Cada año le cuesta más meses llegar a ser él, cada partido más minutos y cada temporada Andrés es crack mucho menos tiempo. Hoy no estuvo. Y yo ya firmo que de los 4 ó 5 partidos en los que tiene que aparecer, lo haga en 2 ó 3.

Tata, una vez más no supo hacer reaccionar al equipo. No hay puntos de inflexión desde el pitido inicial. Solo Messi. Hoy se mostró el míster tan incapaz en este sentido desde el palco como otras veces a ras de césped. Los de arriba aportaron muy poco, por ellos mismos y por lo que venimos contando en estos párrafos. El gol para el de siempre y el más participativo en el primer tiempo un Neymar que aún no está a tope y que una vez más debe cambiarse las botas durante el partido. Que se lo haga(n) mirar.