CENTROCAMPISTAS AL ASCENSOR

Tras el artículo sobre los defensas del Barça B hoy nos detenemos en el centro del campo del filial, los fogones en los que se cocina la identidad del equipo. Un mediocentro y dos interiores con funciones diferenciadas es la base sobre la que se asienta el sistema, base casi irrenunciable. Así que vamos a repasar brevemente los perfiles de 4 jugadores con hipotéticas opciones de cara a la próxima temporada de formar parte del primer equipo.

Sergi Samper es la joya de la corona. Muchas miradas y esperanzas puestas sobre él. En su primera temporada como componente del filial, Eusebio ha seguido los mandamientos del FCB en cuanto a formación se refiere: combinar periodos de titularidad con algunos de suplencia siendo poco exigido por el mister. En el tramo final de la Liga se ha visto a un Samper más asentado, más seguro, con una gran mejora en fase defensiva y asumiendo mayores galones en la construcción. Otro año más en el B a los mandos del equipo pueden hacer de él el futuro cerebro del F.C. Barcelona, la vuelta al “4” como el creador de juego. Pero claro, si no se dispone de sustituto de Busi…

Ilie Sánchez probablemente sea de los jugadores más infravalorados del equipo. El capitán del B, el que tiene mayor ascendencia sobre todos, el que te sirve tanto para un roto como para un descosido. Con casi 24 años está en su última etapa en el filial blaugrana. Mediocentro al uso, maneja de fábula esta posición dentro del lenguaje Barça, pero seguro que no desentonaría en cualquier otro sistema. Ha sido utilizado varias veces como central ante bajas y sanciones durante la temporada, cumpliendo con creces. Incluso en momentos de finales apretados su ubicación como interior dotaba de mayor solidez al equipo. Gran físico, abarca mucho espacio en fase defensiva y procura no complicarse consciente de sus limitaciones. Quizá su debe está en la timidez que trasmite en ataque aunque con interiores de perfil eminentemente ofensivo ejercer de ancla ha beneficiado al equipo. Su futuro no pasará por la primera plantilla y estoy seguro que tendrá su oportunidad el año que viene en primera división.

8 temporadas lleva Javier Espinosa en la cantera blaugrana. El talaverano ha ido subiendo escalones de una manera firme, sin prisa pero sin pausa, asentándose definitivamente en el Barça B como uno de los que tiran del carro. Exquisita técnica y conducción “a lo Iniesta” -y no soy partidario de estas definiciones-, maneja a la perfección tanto la asociación como el desborde. A Espinosa también le gusta llegar al área contraria en segunda línea mediante rupturas aunque su relación con el gol no haya sido demasiado fructífera. Uno de los peros de Javi siempre ha sido su compromiso defensivo y capacidad física para el retorno. Incluso una imagen de cierta indolencia en algunos partidos pero va en su ADN pues Javi es tranquilidad, la misma que transmite a sus compañeros. Complicado su salto a la primera plantilla, tanto por el overbooking actual como por las más que probables llegadas que habrán. Además acaba contrato este junio y a fecha de hoy no ha recibido comunicación alguna por parte del club. Su futuro está en la Liga BBVA, de eso estoy seguro, y a los que le conocemos desde pequeño nos seguirá dando alegrías allá donde recale.

Denis Suárez fue el fichaje estrella de esta temporada con un contrato que le “obliga” a tener ficha del primer equipo la próxima temporada. El gallego dio el salto al City siendo uno de los mayores talentos del fútbol nacional. Esta etapa no fue del todo buena y algunos teníamos ciertas dudas con su incorporación -yo era uno de ellos-. Fueron necesarios unos cuantos partidos para comprobar que Suárez está por encima de esta categoría, muy por encima. Inteligente, descarado, exquisita técnica y un muy buen golpeo. Cuando uno ve a Denis por primera vez tiene una sensación de lentitud en su juego. Luego, cuando encara y se va de su defensor, y del siguiente… el espectador descifra que esa supuesta lentitud es pausa y timing, la elección del momento adecuado. Se especula con su salida en forma de cesión y quizá sea la mejor manera de que siga creciendo, pero de todos los nombrados anteriormente es el que mayor presente tiene.

Un cuarteto de perfiles bien diferenciados es lo que ofrece el filial al primer equipo la próxima temporada. Muchas veces, para cubrir según qué necesidades y roles en la plantilla es mejor mirar la alacena propia que salir de compras al colmado de la esquina porque hay tenderos que dan gato por liebre. Y claro, en otras ocasiones el problema es del comprador que no lee detenidamente los ingredientes y la forma de preparación del producto comprado.