EL CAMP NOU COMO ENTRENAMIENTO PARA EL FUTURO

El Levante UD llega al Camp Nou cargado de moral tras la convincente victoria del pasado fin de semana ante el Málaga. Un triunfo necesario tanto por los tres puntos conseguidos -la situación era límite- como por la manera de conseguirlo. Más allá de anotar tres goles a balón parado, el equipo dominó el encuentro durante 70 minutos del mismo ante un candidato a alcanzar la Europa League. ¿Qué motivos hubo para la mejora? ¿Bajo qué principios tácticos sustenta Lucas Alcaraz la propuesta futbolística granota? ¿Está el Levante UD capacitado para competir en el Camp Nou?

La llegada de Lucas Alcaraz al Levante dotó de una identidad futbolística al equipo, tras los meses de indefinición con Mendilibar. Sus primeras propuestas, del agrado de sus jugadores, buscaron recuperar aspectos básicos en el juego de los últimos años.
-Defensa en repliegue bajo frente al equipo adelantado de los primeros partidos. Los zagueros del Levante UD se caracterizan por su dominio del área pero no por su velocidad de reacción, por lo que el equipo empezó a jugar un poco más atrás y con las líneas más juntas.
-El doble mediocentro es incuestionable. Su formación va en función de los partidos, pero siempre un jugador de gran potencia física -Simao Mate, Diop- combinados con Sissoko o Camarasa, de mayor capacidad en la salida de balón.
-La doble punta, para defender en 4-4-2 y que, en la búsqueda del envío largo, siempre haya dos referencias. En caso de que hubiera llegado Bryan Ruiz, como se esperaba, se colocaría en la posición de mediapunta para lanzar el contraataque, o inclinado a la banda derecha.
-El objetivo de estos cambios con respecto a Mendilibar era conseguir que el equipo volviera a ser compacto defensivamente, dominando y buscando dos partes del juego: la defensa posicional y la transición ofensiva. Pero desde el partido en Elche, entrenador y jugadores descubrieron que quizá la fortaleza defensiva este año, sin un salvavidas como Keylor, no sería suficiente. Por eso, el Levante comienza a trabajar el ataque posicional en el que, si bien nunca destacará, sí le permite sumar nuevos registros ante una situación muy complicada, la peor desde la temporada 2010/2011.

Estos son los principales cambios sobre los que Lucas Alcaraz organiza su equipo, y las mayores diferencias con respecto a Mendilibar. En el Ciutat hay confianza en el entrenador andaluz, pero se es consciente de que la dinámica del equipo los últimos partidos era muy mala, por lo que en la capacidad de sufrimiento y superación de los momentos complicados estará la permanencia -o no- del Levante UD en Primera División.

¿Y cómo afrontar el partido en el Camp Nou ante el mejor Barça -o uno de los mejores- de los últimos años? Lo abordaremos desde dos puntos de vista: lo emocional y lo táctico.

Desde lo emocional, lo primero que hay que saber es que el objetivo del Levante en Barcelona es competir. Mantener las buenas sensaciones del encuentro ante el Málaga e intentar hacer el partido largo, aprovechándose del desgaste culé del partido frente al Villarreal. Puntuar, desde la óptica del barrio de Orriols, es casi una quimera. Si se consigue, bienvenido será. Si no, el propósito es caer dignamente sabiendo que, si has podido competir contra un gran Barcelona en el Camp Nou, lo puedes hacer contra cualquiera.

Desde el punto de vista táctico, no cabe duda que el Levante defenderá en repliegue medio-bajo, intentando no agolparse en propia área pero sí evitar que Suárez, Pedro, Messi o Neymar puedan coger la espalda de los centrales. Su posicionamiento defensivo partirá del 4-4-2, con dos delanteros físicos que incomodarán -más que presionar- la salida de balón por el centro. Sobre todo, el objetivo es no romperse y evitar regalar espacios al contraataque, donde el Barcelona se maneja cada vez mejor y el Levante peor defiende debido a la mayor lentitud de sus centrales. He aquí un punto importante para la mejoría granota. Aún es pronto, pero desde el club están convencidos que la pareja Ramis-David Navarro debe ser uno de los mejores recursos para lograr la permanencia. Su sobriedad frente al Málaga -error individual de Navarro aparte- fue fundamental para corregir los desajustes que partían desde centro del campo.

Uno de los temores, y a la vez una de las mejores noticias, llega desde las bandas. Lo explicamos. La irrupción de Iván López sobre todo, y también de Toño, permite al Levante tener dos laterales jóvenes, muy profundos y con recorrido. Iván López ya es prácticamente el dueño del lateral derecho y Toño lo será del izquierdo dentro de poco. Esto es una gran noticia para el presente y futuro, ya que permite a los granotas ser más imprevisibles y tener un mayor número de elementos ofensivos capaces de hacer daño. Pero en el Camp Nou ante Messi, Neymar o Pedro, es difícil que puedan prodigarse mucho en ataque. Por eso, no se descarta que defensas más experimentados y curtidos en mil batallas como Juanfran puedan ser de la partida. Ahora bien: se hablará mucho en el futuro de Toño e Iván López.

La importancia de los extremos en las ayudas a los dos laterales será vital. Un foco débil en este apartado puede ser Ivanschitz e incluso Rubén: son jugadores capacitados para hacer el esfuerzo defensivo, pero no tiene calidad defensiva para hacerlo continuado en el tiempo, al máximo nivel de concentración y para aguantar los 90 minutos. En este ámbito, Xumetra y Morales son casi segundos laterales y parecen más idóneos.

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La alineación que se adjunta es el XI tipo para Lucas Alcaraz en función de adecuación al modelo y estado de forma, pero jugadores como Juanfran, Vyntra, Casadesús, Camarasa o Xumetra pueden entrar en el equipo en función de los rivales.

¿Y en el plano ofensivo?

Por un lado, las jugadas a balón parado. Ramis, Navarro, Barral, Casadesús, Uche, Juanfran, Vyntra… no jugarán todos, pero el arsenal ofensivo del Levante en estas jugadas es muy grande, sea cual sea la alineación. Aprovechar este tipo de acciones será vital, ya que los granotas no dispondrán de muchas acciones de juego para atacar la meta de Bravo.

Sin duda, el envío en largo será la jugada más utilizada. Tanto Casadesús como Barral y Uche son potentes en esto, tienen facilidad para el juego de espaldas e instinto para los rechaces. Su dominio del juego aéreo permite al equipo avanzar metros y que jugadores como Morales por la banda o Diop-Camarasa por el centro puedan sumarse al ataque.

En las bandas es donde más dudas puede tener Alcaraz. Lo ideal es aprovechar la velocidad de Morales y Xumetra, pero Ivanschitz da un punto de calidad tanto en posicional como en el golpeo a balón parado. En la elección de los extremos podremos vislumbrar la propuesta ofensiva levantinista: Morales es casi un fijo, y quizá el mayor peligro granota, que además se enfrentaría a priori al suplente de Alves; de la duda entre Xumetra o Ivanschiz-Rubén veremos si Alcaraz prioriza la velocidad y retorno defensivo o la calidad con el esférico.

Además del balón largo, el Levante UD tiene otros recursos para sacar el balón. Las conducciones de Iván López son importantes porque tiene calidad en la salida y, sobre todo, desparpajo y atrevimiento. Por dentro, Camarasa es el jugador más dotado para salir con el esférico jugado, pero suelen faltarle socios para juntar varios pases seguidos de calidad. Si finalmente Bryan Ruiz hubiera podido fichar, habría ayudado mucho en este aspecto.

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Búsqueda de la segunda jugada a partir del salto de Uche, Barral o Casadesús y creación rápida del 2 contra 2 en banda con el extremo y lateral. Uno de los mediocentros sirve de apoyo en la zona del mediapunta y el otro mantiene la posición.

A seguir:

Cuatro jugadores son la sensación granota en este momento: Morales, Iván López, Camarasa y Toño. Por su perfil y juventud, el partido le puede venir algo grande a los dos últimos, pero serán importantes en el futuro granota. Curiosamente, con la excepción quizá de Morales, tanto Iván como Camarasa y Toño podrían adecuarse al estilo de juego culé. Tienen desparpajo, calidad y les gusta jugar el balón por el suelo más de que la mayoría de sus compañeros. De hecho, Camarasa fue futurible para el Barcelona B, pero la Segunda División ya se le queda pequeña.

Expectativas:

Competir, salir con la cabeza alta del Camp Nou habiendo servido el encuentro de ensayo para lo próximo. Desde ahora hasta mayo, el Levante UD se enfrenta a los meses más importantes de su historia reciente. La permanencia está en juego. Y el Camp Nou puede servir para afrontar el reto con mayor seguridad.