GALLO ROJO, GALLO NEGRO

El gallo negro era grande pero el rojo era valiente”. Siempre me ha llamado la atención que un club tan grande como la Juve solo haya ganado dos Copas de Europa. Piensas en la planta de la Vecchia Signora, en Sivori, Platiní, Zidane, Del Piero, Roberto Baggio y ojeas su palmarés nacional, casi 50 títulos locales, de los que 31 son Scudettos (Real Madrid tiene 32 Ligas, Bayern Munich 25, Manchester United 20 y Barça 23) y ves que ha metido poco ruido en el continente. Siendo el Barça un club que hace poco más de 20 años no había ganado la Copa de Europa, el sábado puede subirse al cajón de Liverpool y Bayern Munich con cinco. Solo Milán (7) y Real Madrid, el Rey de la Copa de Europa, con diez, se quedarían por encima. Han jugado las mismas finales Juve y Barça, el sábado será la octava, con distinta suerte ya que aunque está Berna, Sevilla y Atenas, los italianos han soportado el duro mazo del dios del fútbol muchas veces. Incluso ganando no han podido celebrar con orgullo. En el 85 fue Heysel, una tragedia difícil de olvidar. En el 96, vencieron a penaltis al Ajax tras 1-1 al final de los 90 minutos. Y la UEFA en tres ocasiones y la Recopa, no retumban en las paredes de Europa como la mítica orejona.

El gallo rojo es valiente, pero el negro es traicionero”. Una grande escuadra medirá al equipo de Luis Enrique en Berlín. El favoritismo es evidente, aun sin el mayor condicionante del mundo del fútbol, Leo Messi, el Barcelona sería mejor equipo que la Juve. Pero creo que no será fácil, la Juve es un equipo con todas las letras. Manejó muy bien los tiempos de la eliminatoria de semifinales ante el Real Madrid, ni siquiera necesitó –quizá no hubiera podido- hacer 90 minutos excelentes para eliminarle. Se dejó -o aceptó el escenario- dominar territorialmente, midió bien sus salidas para minimizar el riesgo de contragolpe que con Gareth, Benzema y Cristiano podría haber supuesto una muerte segura y aprovechó el talento de su 9 para asestar dos pequeños golpes que resultaron definitivos. Tiene cinco puntos principales el bloque de Allegri: Buffon, Chiellini, Pogba, Vidal y Tévez. Chiellini no estará, baja mayúscula en lo emocional para los italianos. Quizá el hombre que se merendó las opciones del Real Madrid con su carisma. Y en menor medida, Álvaro Morata, una pieza decisiva para los movimientos de Tévez y con quien nadie contó antes de jugar contra el equipo de su corazón y al que desangró sin piedad, aunque en silencio, sin celebrarlo, como matan los asesinos de élite. ¡Cuidado!

No se rinde un gallo rojo mas que cuando está ya muerto”. Preguntarse por el contexto de juego de un partido cuando están Xavi y Pirlo, Pirlo y Xavi, resulta complejo si la realidad te lleva a que a ambos se les van los últimos pases de su carrera. Xavi viene de completar una buena, muy buena, temporada desde una fila de asientos distinta a la que siempre ocupó. Ha cambiado partidos, ha dibujado escenarios ganadores en media hora, temporizando la pelota, bajando o acelerando el giro del planeta. Se le ve fresco, con la chispa necesaria para salir y ser Xavi un rato, el suficiente para que no se note que no somos tan Barça aunque seamos igual de buenos. Y el italiano, lleva el peso aparente del centro del campo juventino, ya no juega con la realidad de su figura y su presencia es soportada eficientemente por un sistema defensivo muy potente. Creo que solo con la pelota posada en la hierba puede hacer daño. Son dos genios que se van, arrancarán un trozo del césped del fútbol cuando el árbitro pite el final del partido en Berlín y quizá nunca más crezca la hierba en la parcela central. Pero el contexto real lo pone Leo Messi. Resulta complicado escribir sobre el pequeño genio, se ha dicho todo, se dice cada día, él se encarga de recordárnoslo cada vez que juega. Seguramente todos los análisis sirvan de poco cuando el 10 decida acelerar, probablemente salten por los aires artículos de miles de palabras que intentan anticipar cómo va a ser el partido, como si fueran trozos de tierra al paso de un tropel de caballos salvajes. Ante eso, solo queda disfrutar, solo queda pensar que esta noche podemos levantar por quinta vez ‘La Coppa dei Campioni’ y asestar un golpe a la historia del fútbol haciendo, por primera vez, el segundo triplete. La gesta de nuestras vidas.