El Barcelona está cuajando un inicio de temporada a buen nivel. Salvo los minutos de pájara en Alemania que costaron el partido ante el Rhein Neckar Löwen, el Barça Lassa ha logrado imponer su nuevo estilo, más vigoroso y ambicioso, a todos sus rivales en España y Europa. Son varios los nombres destacados en este fulgurante inicio de los de Xavi Pascual, y muchos miran a la que parece ser una rápida adaptación de los fichajes, pero hay un “fichaje” con el que se contaba menos y que está resultando muy destacado: Lasse Anderssön.

El central danés volvió a sentirse jugador de balonmano con su regreso a finales de la temporada pasada tras 13 meses lesionado de la rodilla, pero ha sido este año, tras una buena pretemporada junto al equipo, que ha alcanzado un nivel, incluso, superior al que mostró ante de la lesión, como demostró ante el Bidasoa o ante el Benidorm, por poner dos ejemplos, partidos en los que Anderssön fue el máximo estilete de la primera línea azulgrana.

La presencia del escandinavo funcionando a pleno potencial supone un gran alivio para Pascual, ya que le ofrece la posibilidad de rotar a sus otros centrales, Entrerríos y Palmarssön, e incluso a los laterales, tras observar el potencial ofensivo del centra danés, y dota a la plantilla de mayores recursos y posibilidades. Asimismo, la recuperación de Anderssön supone la vuelta de uno de los jugadores con mayor proyección del continente y la plasmación de la apuesta por jóvenes promesas que ha traído a la Ciudad Condal a otras joyas como Fàbregas y Mem.

El equipo, que ha sumado importantes victorias ante Montpellier y Meshkov Brest en Champions League en los últimos días, se encuentra disputando la Super Globe en Doha (Catar), donde es el gran favorito.