En agosto Leo Messi pronunció cuál era el objetivo principal de la plantilla y el origen y final de la temporada 2018/2019: Ganar la ansiada Copa de Europa. Ganar y dominar de forma bastante contundente en España esta década ha significado ser probablemente el equipo más fiable y competitivo en el día a día del continente europeo, pero Messi y esta generación lleva coleccionando fracasos sonoros en la Champions que han menguado el carisma y el legado de una generación irrepetible. Si Messi dijo lo que dijo es que sienten y saben que deben volver a asaltar la orejona.

Durante la temporada, irregular en cuanto a juego y resultados (pinchazos sonoros en liga y Copa), el equipo ha parecido mejor y más serio cuando ha jugado en Europa. La realidad es que han sido en total 7 partidos. El bagaje ante esta cifra tan ridícula de partidos no da para extraer conclusiones. Lo que se ha demostrado es que, a pesar de las ansias y la necesidad de estos jugadores y de esta plantilla de conseguir la Champions, esta competición no determina quién es el mejor, sino simplemente quién tuvo más acierto en un puñado de encuentros muy concretos que se vienen desde febrero hasta mayo.

Tras haber eliminado al Real Madrid en la Copa, esa competición que poco importa, pero por la que se siguen montando campañas y tifos en busca del ansiado pase a la final. Haber dado el paso de gigante liguero en el Santiago Bernabéu le permite a Valverde plantear el asalto a la puta Copa de Europa.

Antes, deberá mantener un tono competitivo adecuado en la Liga, asumir salidas complicadas como Madrigal o el Villamarín y sumar los tres puntos en el Camp Nou ante el Atlético de Madrid para asegurar repetir un campeonato de liga que ha demostrado que hasta ahora no hubo ningún equipo mejor.

En la Champions cabrá confirmar los pronósticos y sacar la victoria con suficiencia vs Olympique de Lyon, meterse en cuartos y esta vez sí, mantener el tono en la maldita eliminatoria entre los ocho clasificados en esta ronda clasificatoria de esa competición organizada por la UEFA. Hasta ahora el Barça fue el mejor, sin discusión, pero ha llegado un punto en el que debe parecerlo en fechas señaladas. El proyecto se lo exige.