VOLVER A SER RECORDADOS



El Camp Nou recibirá el sábado al Celta de Vigo, un histórico que este año ha regresado a la máxima categoría tras un periplo en segunda más largo y dramático de lo que se hubiera deseado. Fue un largo paréntesis sin apenas momentos dulces que recordar, sufriendo el baile de entrenadores muy poco o casi nada cualificados, teniendo en sus filas a infinidad de jugadores e incluso coqueteando con la 2ªB. Sin embargo, la llegada de Herrera y una acertada dirección en la planificación han conseguido el retorno del club celtiña a la Primera División.

La realidad es que nos encontramos ante un rival bastante curioso y paradigmático. Curioso, porque aunque sea de forma tan interesante como tangencial, tiene relación con la historia reciente del Barça. Así, el actual entrenador Tito Vilanova defendió la camiseta celeste durante tres temporadas, entre los años 1992 y 1995. No solo esto, sino que el último partido que disputó como jugador Pep Guardiola fue contra ellos en unas semifinales coperas donde la vuelta se disputó en un desangelado Camp Nou.

Por otro lado, como apuntamos, es un equipo paradigmático de la evolución de los equipos en la Liga Española. A finales de los 90, cuando tenía por apodo el tan poético “Liga de las Estrellas” y efectivamente cada conjunto tenía a su jugador rutilante, el conjunto olívico presentaba en nómina a Mostovoi, Karpin, Revivo, Mazinho, Penev o Gudelj, casi nada al aparato. Dirigidos primero por Jabo Irureta y después por Víctor Fernández se convirtieron en uno de los equipos que practicaban un fútbol mas atrevido, bonito y brillante, algo que no solo sería en la Liga española: 3-1 al Liverpool, 4-0 a la Juventus, 7-0 al Benfica de Enke o la victoria 0-1 en Villa Park. A estas hay que añadir el 1-2 al Milan en San Siro en una continuación de este ciclo, pero siendo ya mas prosaico, menos brillante con Lotina de entrenador. Sin duda alguna, fue la época más brillante del Celta que consiguió formar un equipo para el recuerdo con varias participaciones europeas (incluso la Champions), coincidiendo con las vacas gordas en el fútbol español.

Hoy en día esta situación es distinta. La Liga española, salvo los dos grandes y alguno mas en alguna situación puntual apenas gasta porque no tiene para hacerlo. Incluso el pomposo nombre de La Liga de las Estrellas ha dejado paso al mundanal y mercantil apelativo de Liga BBVA. El Celta no es una situación a esta realidad, lo que sumado a la mencionada travesía por el infierno y a la Ley Concursal han dado lugar a la plantilla tan especial que hoy en día tiene.
Paco Herrera, el técnico protagonista del milagro del ascenso (aunque para él no es el primero) cuenta con 23 jugadores de los cuales 11 son de la cantera. Esto es algo más que mera anécdota, ya que desde que la Ley Bosman permite a los clubes llenarse de jugadores foráneos el conjunto olívico nunca había alcanzado tales cotas de canteranos en su primer plantel. Por otra parte, y al contrario de lo que hizo al frente del equipo en los dos años anteriores, en esta ocasión no ha realizado apenas rotaciones. La explicación radica en buscar asentar el once y la idea en Primera División como objetivo fundamental y a partir de ahí ir incorporando jugadores que serán muy aprovechables a lo largo del año. De hecho en las últimas jornadas, aunque mas en los cambios que en el equipo inicial, pero ya ha ido dando cancha a mas jugadores. Sea como fuere, esta situación hace que el once de Paco Herrera no sea demasiado difícil de adivinar.
En la portería nos encontramos con Javi Varas, uno de los fichajes de este año y con experiencia en la categoría, algo de lo que el Celta no anda precisamente holgado. Sin embargo, la contratación del ex portero del Sevilla en un primer momento no fue del agrado de toda la hinchada celtiña que consideraba que con Sergio y Yoel (ahora cedido en el Lugo) tenían el puesto bien cubierto. A pesar de esto, la llegada de Varas es una buena noticia ya que estamos ante un portero de condiciones, con experiencia en la máxima categoría y que ya ha demostrado el nivel que tiene. Desde su fichaje se convirtió en titular indiscutible jugando siempre excepto cuando tuvo alguna pequeña lesión. Sin duda alguna debe ser uno de los grandes baluartes para el conjunto vigués este año.
La línea defensiva, formada por cuatro hombres ya tiene presente la nueva identidad del equipo, así como las variaciones que implica jugar en 1ª y no en 2ª. Los dos laterales son canteranos, siendo Hugo Mallo, el lateral diestro, una de las joyas de la corona de este proyecto, habiendo sonado incluso para plazas más importantes. Sin embargo, tanto él como Roberto Lago, el lateral izquierdo, no están teniendo tanto peso en el equipo como en la categoría de plata del fútbol español. Hace un año, el conjunto olívico buscaba mandar, dominar desde el balón y atacar en posicional (aunque esto también era debido por la predisposición defensiva que presentaban los rivales). Esta situación permitía que los laterales se asentasen en salida en la medular y a partir de ahí tener peso ofensivo, sobre todo gracias al buen desempeño técnico de ambos. Sin embargo, este año el Celta aunque sigue teniendo buen gusto al trato de balón, presenta un fútbol más vertical, basado en las transiciones (algo normal) y eso impide que los dos laterales lleguen a asentarse en la jugada, quedando mas aislados de ella. En la faceta defensiva salvo algún error puntual apenas han sido expuestos y están rindiendo al nivel exigible para sobrevivir.
La pareja de centrales en el Camp Nou presentará una novedad. La presentada hasta el momento estuvo formada por Túñez y Cabral, pero la inocente expulsión de este último en el derby gallego impedirá su concurso contra el Barça. Es una baja muy sensible ya que estamos hablando de uno de los graduados de JIM del año pasado, poco más se puede añadir a eso. Su sustituto, Samuel, también será baja por lesión por lo que todo apunta a que Jonathan Vila, otro canterano, será la pareja de Túñez. Es sin duda el punto más vulnerable del Celta que necesitará que el venezolano de un paso más para ser brillante además de sobrio.
Por delante de ellos se dispone un doble pivote donde el que manda es un Borja Oubiña ya recuperado para el fútbol. No llega al nivel que mostró antes de las lesiones de rodilla pero sigue teniendo un gran peso específico en su equipo. Él es el encargado de iniciar la jugada desde atrás bajando hasta los centrales, aunque situándose por delante de ellos, no confundir con salida lavolpiana (centrales abiertos y el mediocentro ubicándose entre ellos). De este modo el Celta garantiza una salida limpia desde atrás y poder asentar la jugada, aunque sin darle la importancia que le daba en 2ª, por el cambio en su juego que ya hemos comentado.
La disposición y el jugador que acompañe a Borja Oubiña en el doble pivote es el gran misterio. Empezando por el segundo punto hay que decir que su acompañante está siendo casi siempre Álex López lo que siempre garantizaba vuelo alto ya que disfruta descolgándose para abarcar campo hacia delante y llegar hasta el área, algo normal teniendo en cuenta que es mas mediapunta que mediocentro. Sin embargo, ya en el derby observamos que esto no se producía ya que el jugador mantenía la posición mucho por detrás del balón, siendo sin duda una instrucción de Paco Herrera para tener 6 jugadores para defender tras pérdida y que seguro lo veremos en el Camp Nou también. Además, lo más probable es que para defender un poquito mejor, el canterano se ubique en su posición real de mediapunta y con Oubiña juegue otro jugador mas defensivo. De ser así y teniendo en cuenta que Natxo Insa sigue lesionado, el escogido sería Bustos, repitiendo la fórmula de 2+1 del Bernabeu.
En las bandas tampoco existen dudas. Por la derecha jugará el argentino Augusto Fernández y por la izquierda el danés Krohn-Dehli. El primero es mucho mas vertical y directo, casando bien con el estilo de juego del Celta y además de momento está rindiendo bastante bien. Su duelo con Jordi Alba será uno de los atractivos de la noche por las condiciones físicas parejas de ambos. Además el celtiña también tiene cierto grado de sacrificio defensivo por lo que ver quien decanta este duelo puede ser una buena pista para saber hacia donde sgirará el partido.
Por su parte Krohn-Dehli es mas especial, más indescifrable y más jugador, aunque de momento solo lo ha mostrado con cuenta gotas. Presenta una tendencia interior mucho más pronunciada que su compañero de la banda derecha, por lo que es mucho mas asociativo y ayuda en labores de construcción a Oubiña y a Aspas, además de presentar peligro a puerta hacia el gol. Es un jugador que el Celta está obligado a activar, porque su activación significará goles y puntos, o sea, le dará un empaque y una base a su equipo que de momento no está terminando de tener.
Por último arriba está la joya de la corona: Iago Aspas. El canterano ha aterrizado muy bien en primera y es de largo el jugador más importante y contextual de la plantilla. Puede engañar su movilidad pero es sin duda delantero centro y recuerda, aunque en un nivel inferior al Kun Agüero. No en el gesto técnico pero si en la forma de jugar. Iago, como el argentino, gusta por relacionarse con el balón bajando unos metros a tener mucho contacto con él. No solo esto, sino que su caída a cualquiera de las dos bandas es una constante. Vertiginoso y vertical, ordena al equipo con su posición marcándole siempre la salida y por donde atacar, casando además de maravilla con él fútbol de transición ofensiva celeste. Además es muy inteligente para detectar las debilidades de la defensa contraria. En el derby le sacó amarilla a los dos centrales y en el Bernabeu atacaba constantemente a Varane buscando alejarse de Pepe. Sabiendo esto y teniendo en cuenta que la pareja de centrales blaugrana estará formada por Mascherano y Song/Adriano, las posibilidades de que surja un contexto favorable para el diablo celtiña son muy altas. Probablemente jugará él solo arriba (4-2-3-1) por lo que hemos ya apuntado de la base defensiva 2+1 y Álex de MP. En caso de buscarle un acompañante (4-2-2-2) sería Bermejo, De Lucas o Park, que seguramente tienen sus opciones en el mismo orden en el que acabamos de colocarlos.
Este es el plan que tiene Paco Herrera para tomar el Camp Nou y así ponerle mas brillo aún a su mas que buena andadura en su regreso a la máxima categoría. Enfrente está el lider, aunque no es tan sólido como parece. Sus problemas en transición defensiva, aunque ya algo mas mitigados, siguen estando ahí, como también las dificultades que hay para encontrar una pareja de centrales coherente ante las persistentes bajas de Piqué y Puyol. Ambos aspectos casan perfectamente con los dos valores más en alza del Celta: su transición ofensiva con una pradera por delante lanzando a sus cuatro (o tres) hombres mas ofensivos y Iago Aspas, lo que hacen que la misión sea muy, muy difícil, pero no imposible. Sería una victoria que aceleraría el destino de una plantilla y un entrenador que con calma y tiempo pueden alcanzar: como ya les pasó a finales de los 90, ser recordados.