SONRISAS Y LÁGRIMAS (Y SILBIDOS)

Final del curso 12/13 en el Camp Nou con bastantes sonrisas, algunos silbidos y muchas lágrimas.

Lágrimas por la marcha de un símbolo, un 22 que siempre quedará ligado a un francés de zancada larga, porte elegante y exquisito en sus palabras. Un jugador que hemos visto crecer en el club hasta llegar a convertirse en el máximo baluarte defensivo de aquel Barça 10/11, que ha levantado trofeos y que simboliza una lucha en la que la mayoría, de una manera directa o indirecta, estamos embarcados. Merci pour tout Eric Abidal.

Sonrisas por el partido de hoy, sobretodo por una primera parte magnífica. Ritmo de balón alto, movilidad, presión tras pérdida, diagonales sin balón, llegadas por banda, penetraciones, asociaciones…

Muchas cosas de las que ha adolecido el equipo en los últimos meses aparecieron como por arte de magia durante la primera mitad aunque un Málaga ramplón y sin tensión ninguna ayudó a ello.

Resumiendo, Cesc completó treinta minutos soberbios, Villa participó y se asoció, Pedro picó por fin la espalda de la defensa, Iniesta dispuso de espacio y tiempo para trazar geometría euclidiana y Montoya se revindicó como una realidad y no como un parche. Si añadimos tres goles en 15 minutos en la coctelera, nos da como resultado 45 minutos ricos, ricos, ricos.

La segunda parte no fue tan golosa para los espectadores. El equipo malagueño adelantó la línea de presión y evitó que el Barça estuviera cómodo. Crecieron las pérdidas en medio campo y las llegadas rivales a las inmediaciones de Pinto, titular hoy en detrimento de Valdés. Tras el gol de Iniesta (precioso) llegó el momento para que Thiago ingresara en el campo por el de Fuentealbilla. Se le notó nervioso e incómodo, con pérdidas constantes. Es de suponer que su situación actual afecta a su fútbol, aunque fue recibido con aplausos por el Camp Nou. Un error suyo propició el gol blanquiazul, un señor gol por cierto.

Acto seguido la OVACIÓN para Abidal, 15 minutos de juego como premio a una trayectoria intachable, que espero que continúe por muchos años allá donde él quiera. Minutos finales también para Alexis, que dio sensación de haber dejado de una vez el nerviosismo en el vestuario y se le vio decidido y confiado. Queremos a este Alexis de final de temporada, el “jugadoraso”.

Silbidos por parte de una minoría, bien es cierto, pero es un síntoma de la situación actual del Club. Se oyeron cuando Abidal, en los agradecimientos tras el homenaje recibido sobre el césped, pronunció la palabra directiva. Cada cual tendrá su opinión al respecto. La toma de decisiones nunca es sencilla, pero también es cierto que a veces algunos la complican más de la cuenta.

Y esto es todo amigos lectores. Gracias por compartir con todo el equipo de Rondo Blaugrana esta temporada tan apasionante para nosotros. Eso sí, seguid acompañándonos durante este periodo veraniego, que seguiremos surtiendo el blog de más contenido y con alguna que otra sorpresa que esperamos sea de vuestro agrado.