RC CELTA DE VIGO: CON LOS OJOS PUESTOS EN LUIS ENRIQUE

Nunca choveu que non escampara. La semana pasada un temporal de lluvia y viento asoló las costas gallegas durante varios días. Llovió y llovió sin parar, como si no lo hubiera hecho en años. Hasta que el temporal amainó y las nubes y la lluvia abandonaron Vigo. De momento.

Algo similar ocurrió con el RC Celta de Vigo. Después de encadenar siete partidos seguidos sin conseguir los tres puntos, con el entorno cuestionando al técnico asturiano en voz alta y con muchas dudas sobre la presencia de determinados jugadores en el campo, los de Luis Enrique visitaban la Rosaleda muy necesitados. Y el partido no pudo desarrollarse de mejor forma. El Málaga se mostró como un conjunto con una falta de intensidad y concentración alarmantes y el Celta no desaprovechó la oportunidad de resarcirse de las ocasiones falladas en anteriores encuentros, mostrando una efectividad nunca vista hasta el momento.
Los de Luis Enrique jugaron bien y ganaron. Pero hasta el sábado sus buenos encuentros se traducían más en derrotas y empates que en victorias.

Luis Enrique llegó a Vigo con mucha fuerza. Su fichaje entusiasmó a la parroquia viguesa y desde el primer momento se le recibió con los brazos abiertos. Su pasado como futbolista y sus buenas temporadas con el filial azulgrana y (menos) con la Roma eran una carta de presentación suficiente para ilusionar al celtismo. Después llegaron los fichajes de Fontás, Charles, Nolito y Rafinha. Vigo era una fiesta. En estas entró en escena Tito Vilanova y su enfermedad; y Lucho, según la prensa de Barcelona, era uno de los candidatos a sentarse en el banquillo del FC Barcelona. A pesar de que al final continuó en Vigo, a la prensa de Vigo y a muchos aficionados del Celta no les gustó que Lucho no saliera públicamente a desmentir los rumores. El técnico asturiano prefirió seguir trabajando y ni se molestó en acallar los rumores.

Y es que Luis Enrique, al igual que Pep Guardiola, es un entrenador que valora mucho su vida privada y no concede entrevistas más allá de las obligatorias por cada partido. Esto en muchos periodistas locales no gusta nada. Acostumbrados a tener un trato preferente por los entrenadores que ocupan el banquillo celeste no llevan bien que Lucho no les conceda entrevistas y que realice tantos entrenamientos a puerta cerrada.

Para añadir más leña al fuego, a pocas semanas de empezar la liga decidió descartar a Andrés Túñez, uno de los canteranos más queridos por el público de Balaídos. Cada vez eran más los que empezaban a mirar con desconfianza a Luis Enrique.

El balón empezó a rodar. Durante las primeras jornadas, con el equipo ofreciendo muy buena imagen, esa falta de sintonía de Lucho con la prensa no trascendió. Pero tras las primeras derrotas no tardaron en hacérselo saber. Y a raíz de los malos resultados el pensamiento fue calando también en los aficionados celtiñas. A pesar de la victoria frente al Málaga son muchos los que critican el sistema empleado por el técnico asturiano, muchos los que recelan de tanto futbolista con pasado de la Masía y son muchos los que critican la arriesgada apuesta de Lucho por dos jóvenes canteranos como son David Costas y Santi Mina. ¿Son razonables estas críticas? Yo creo que no.

Hasta el momento el Celta ha ofrecido buenas sensaciones. Ha competido en todos los partidos (excepto contra el Getafe) y da la impresión de que a estas alturas merecería tener algún punto más. La falta de acierto de cara el gol le ha privado de tener por lo menos tres puntos más e ir en una posición más desahogada en la tabla.

Formado en torno a un 4-3-3, es un equipo que apuesta por la posesión de balón, por ataques posicionales largos y elaborados, con buena circulaciones de balón y, una vez que el equipo esté bien posicionado en campo rival, arriesgue intentando generar una ventaja en ataque, para que en caso de perder el balón sus jugadores estén bien colocados para recuperarlo.

Pero esto no siempre lo consigue. En ocasiones sus jugadores arriesgan un pase antes de la cuenta. En otras hacen un regate con el equipo sin estar junto. O en otras el poseedor de balón no tiene un apoyo de cara con el que descargar el juego ante la presión rival y darle continuidad. Pero Lucho sigue trabajando conceptos, ya que es vital que el equipo realice bien esta fase del juego. En función de ella defenderá y ésta es la principal debilidad del club olívico: la defensa posicional.

El Celta es un equipo que defiende mal su área. Le cuesta mucho sufrir, los centros laterales son un martirio para sus defensas y carece de jugadores con buena técnica defensiva (Toni). Sin embargo, y aunque aún le quede mucho, parece que el equipo está mostrando una mejoría en esta faceta.

En ataque posicional el equipo se ordena formando triángulos. Los centrales se abren convirtiéndose en los primeros receptores de balón y siendo Fontás quien tiene más protagonismo en la elaboración. Por dentro se coloca Oubiña y los laterales hacen lo propio casi a la altura del centro del campo. Entre ellos y Oubiña se posicionan los interiores. Y arriba, formando una línea de tres se colocan los extremos y Charles.

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Como decía, el juego lo inician los centrales, que pivotan con el medio centro hasta que encuentran la siguiente línea de pase. En general suele ser para los laterales, que reciben muy arriba o para los interiores. Si el equipo no ve posibilidad de avanzar juega de cara y vuelve a empezar jugando hacia el otro lado.

Otra posibilidad de primer pase puede ser la de jugar con los extremos, sobre todo con Nolito. El andaluz protege muy bien el balón y es capaz de girarse con un contrario a su espalda, por lo que es una recepción que también tiene trabajada el Celta.

Hasta ahora el equipo celeste ha tenido momentos de buenos ataques posicionales, consiguiendo desbordar a sus rivales (sobre todo en banda izquierda), principalmente en los primeros partidos. Pero tiene un problema con sus interiores. Tanto Rafinha como Álex López o Khron-Dehli son jugadores verticales, que gustan de ir hacia arriba o de arriesgar en el pase y en el regate; y en ocasiones provocan pérdidas que su equipo acaba pagando porque todavía no se ha asentado en campo rival.

Otro problema que venía mostrando el equipo era la posición del medio centro, que en ocasiones estaba demasiado alejado de la pareja de interiores, tanto en defensa como en ataque, dejando huecos en la primera línea de presión al defender y cortando la continuidad del juego en ataque. Sin embargo parece que poco a poco el equipo está corrigiendo estos desajustes.

El caso es que frente al Barça no creo que veamos a un Celta llevando la iniciativa y jugando mucho tiempo en ataque posicional. Intuyo que el Celta se moverá más en transición ofensiva. Y esto le puede venir muy bien al equipo de Luis Enrique. El Celta se desenvuelve muy bien en transición ofensiva; y al Barça le puede hacer mucho daño.

Casi todos los jugadores de ataque celeste son jugadores que interpretan muy bien los contragolpes y que se mueven muy bien con espacios. Toni y Hugo Mallo se suman con mucho peligro por fuera y ponen buenos centros. Álex López y Rafinha conducen muy bien y son capaces de desequilibrar en el uno contra uno. Nolito y Santi Mina son un cuchillo con espacios. Y Charles hace siempre lo que el equipo necesita, jugando de cara al primer toque, aguantando el balón cuando hay que ganar tiempo, buscando el espacio…

Ahí puede estar el partido para los de Lucho. Defender al Barça en campo propio, con una línea de cuatro, tres ó cuatro metros por delante del borde del área, y otra de cinco cerca del centro del campo. Con los interiores y Oubiña tapando las recepciones interiores y Charles trabajando sobre Busquets. En cuanto se recupera el balón buscar a los interiores a la espalda de Xavi e Iniesta o Cesc. Yo creo que ahí puede tener sus opciones, siempre y cuando el Barça no tenga un día brillante en lo técnico.

Por lo tanto, ¿qué once puede sacar mañana Luis Enrique?

Yoel es un fijo en la portería. El acompañante de Fontás en el eje de la zaga venía siendo David Costas, un canterano de aún 18 años por el que Luis Enrique está mostrando muchísima confianza. Sin embargo en el encuentro frente al Málaga prefirió darle descanso y puso en su lugar a Gustavo Cabral, realizando un buen encuentro. Pero yo me lo tomo como un descanso y apostaría a que mañana sale de la partida contra el Barça. Costas es un central muy completo. Tiene una salida de balón aseada, físicamente tiene buenas condiciones y tiene mucha intuición. Pero es muy joven; aún está en edad juvenil.

En los laterales estarán Hugo Mallo y presumiblemente Toni. El de A Coruña es otra de las principales apuestas del asturiano. Siendo media punta o extremo en las categorías inferiores del club y durante la campaña del ascenso a Primera, las circunstancias han hecho que Luis Enrique lo haya probado en esa posición durante la pretemporada y haya pasado de ser declarado transferible a ser titular indiscutible. En ataque aporta mucho al equipo con sus continuas subidas pero en defensa sufre mucho. No tiene técnica defensiva y en el uno contra uno lo superan con mucha facilidad. Al igual que Costas, no jugó frente al Málaga. Pero es tan importante su aportación ofensiva que apostaría a que también sale de inicio en lugar de Aurtenetxe.

Por delante estará Oubiña y Álex López en uno de los interiores. El otro puesto de interior debería ser para Rafinha. No obstante no descartaría la opción de Augusto por dentro. Contra el Málaga hizo un gran partido. En ataque se suelta menos que Rafinha y Álex López guardando más la posición y en defensa es más agresivo y difícil de superar. Podría ser una buena solución para defender a los centrocampistas culés.

Y arriba estarán Charles, Nolito y la duda de Santi Mina o Augusto. El argentino por fuera también ofrece muchas cosas al equipo. Sabe aguantar el balón, le da continuidad al juego, presenta una buena cuota de gol y tiene calidad tanto en el uno contra uno y centrando. Sin embargo es lento. Y si el Celta quiere hacer daño en transición ofensiva al Barça tiene que amenazar por fuera; y Santi Mina es pura potencia. Además tiene gol. Y Luis Enrique lo sabe.¿Se atreverá a jugar frente a FC Barcelona con dos juveniles?