1X1: NEYMAR JR. & PEDRO RODRÍGUEZ

NEYMAR HA APRENDIDO MÁS QUE EL BARÇA por EUMD

Uno de los principales retos que debía afrontar el Barça esta temporada, era el encaje de su único fichaje: Neymar. Ahí el Barça ha perdido un año. En relación al brasileño, la 2014-15 empezará igual que la 2013-14, sin que se hayan dado pasos para ensamblar al jugador en una idea colectiva. Apenas se ha avanzado para construir un discurso en el que el brasileño sea algo más que un gran interprete solista. El Barça de Messi y Neymar es un reto que aun no se ha enfrentado. Todavía no se ha encarado la cuestión de cómo habilitarle las recepciones en tres cuartos, ni se ha trabajado para que pueda explotar sus posibilidades con libertad para irse hacia dentro, ni se ha despejado la incógnita de cómo se repartirá los espacios con Messi cuando ambos coincidan en el carril central. Muchas teclas, pero ninguna apuesta decidida, tras lo cual Neymar sigue siendo el recién llegado al equipo después de una temporada entera como azulgrana.

Esto no significa que el año del brasileño no haya sido positivo. Ha decidido directa o indirectamente un buen puñado de partidos -algunos realmente importantes-, su talento y calidad están fuera de toda duda, y desde un punto de vista más individual, ha dado al equipo aspectos que le faltaban. Especialmente notoria se hizo esa necesidad al principio de temporada cuando, con un Messi tocado, el resto buscaba en Neymar las gotas de impredecibilidad que han perdido como colectivo. Finalmente cayó Leo, que se detuvo para volver en mejores condiciones, y Neymar encontró un hábitat más cómodo. Al regreso del argentino tocaba juntarlos a ambos, pero entonces quién se lesionó fue Ney. Cuando volvió se encontró a un Barça que jugaba con cuatro centrocampistas y en el que Iniesta participaba tirado a la izquierda. No parecía tener un lugar claro para él, pero aún así encontró acomodo en banda derecha, desde donde protagonizó los mejores minutos de entendimiento con Messi de todo el curso. La eliminación en Champions y una segunda lesión, le hicieron desaparecer hasta el mismísimo final de una temporada que le ha servido más a él para saber dónde está, que al Barça para entender lo que tiene.

* * * * *

PEDRO EN TRES FASES por EUMD

Para Pedro la temporada empezó con un órdago de Martino. Neymar, el fichaje estrella, iba entrando en banda izquierda y estando también Messi, todos tenían claro que arriba sólo quedaba una plaza. En la banda derecha intuíamos que el favorito del Tata era Alexis Sánchez, pero el técnico rosarino, para no descubrirle sus cartas al vestuario demasiado pronto, empezó alternándolos a los dos. Un partido para cada uno y la oportunidad de ganarse un puesto en el once en base al rendimiento propio.

No obstante, a medida que el equipo se iba definiendo, el chileno ganaba la partida, y para colmo la baja de Messi benefició al 9 y perjudicó al 7. Fábregas tomó el lugar de Leo, y Pedro se afianzó como primer hombre de refresco arriba. De una lesión a otra, a la vuelta del 10 el que salió fue Neymar, pero no para dejarle su sitio al canario, sino para que el Barça juntara en el mismo once a Busquets, Xavi, Cesc e Iniesta. Pedro se mantuvo, pues, en un rol de cuarta opción para la delantera que cuando Neymar estuvo recuperado pasó a ser quinta.

El Barça de los centrocampistas era el plan mientras el equipo estuviese vivo en Champions, pero cuando el Atlético de Simeone lo apeó de la competición, se desechó. Con la Liga como única aspiración, Martino disminuyó la complejidad, aceptó un planteamiento incompleto pero suficiente ante rivales de menos potencial y buscó reforzar al grupo desde lo conocido. 4-3-3 con Xavi e Iniesta en los interiores y dos extremos abiertos que, sin Neymar, serían Alexis y Pedro. El canario en banda izquierda, la que ahora mismo parece que le va mejor, ofreció su mejor rendimiento esta temporada. Sobretodo cuando su compañero de carril fue Jordi Alba.