Hace un par de veranos, ya -y todavía- hablábamos de la cantera del Barça como el gran referente mundial. Es un hecho que fue construyéndose, por diversos motivos muy comentados, con el mismo paso firme que la confirmación de un estilo que tanto debate ha generado los últimos años. Curiosamente, en ambas cuestiones, el debate ha sido mayúsculo en la mejor época que ha vivido el club en su historia. Si nos vamos a mayo de 2006, París, con el Barça buscando su segunda corona continental, observamos a tres futbolistas de la Masía en el XI: Víctor Valdés, Oleguer Presas y Carles Puyol. Si contamos la entrada de Andrés Iniesta tras el descanso, fueron cuatro los componentes del campeón de Frank Rijkaard. Tres años más tarde, Roma, con el Barça de Pep Guardiola buscando su primer laurel continental -el tercero del club- fueron siete las piezas titulares ante el Manchester United: Valdés, Piqué, Puyol, Busquets, Xavi, Iniesta y Leo Messi. Pedro también jugó, testimonialmente, parte del descuento -entró por Andrés Iniesta en el 92-. Ocho de la Masía, por tanto, en la segunda final en tres años. Y Londres, otra vez, como en el 92. El equipo de Pep llegaba a su segunda final en tres temporadas, y otra vez siete chicos de la Masía partían de inicio en el XI que nos haría Campeones de Europa por cuarta vez: Valdés, Piqué, Busquets, Xavi, Iniesta, Pedro y Messi. Carles Puyol por Dani Alves minutos antes del final, provocaron que terminasen el encuentro ocho futbolistas creados en la cuna del club.

En este breve y puntual relato de los mayores éxitos de la historia del FC Barcelona, paseamos por tres ciudades inolvidables para la retina culé. Testigo, cada una de ellas, del asentamiento de una idea, de un empeño, de un trabajo de muchos pisado, hoy, por la ineptitud de unos pocos. Sin entrar en aspectos institucionales o nombres con corbata, solo el aspecto deportivo, la última temporada fue una parada de emergencia para el ascensor de la Masía. Las circunstancias, sabidas, de la desgracia de Tito y el caos de inmediatez en la llegada de Gerardo Martino provocaron un paréntesis en la cadena de formación. Solo Bartra y Sergi Roberto parecieron contar con cierto protagonismo en la tan marcada gestión de futbolistas de la casa. Marc no llegó a ser titular, pero si terminó la temporada convenciéndonos a casi todos de que su asentamiento en el primer equipo era total. Esta pretemporada se confirma, más si cabe, el colosal futbolista que ha nacido en la Masía. Y Sergi Roberto, que acumuló cerca de la veintena de encuentros, se convirtió por fin en un futbolista útil en la rueda del primer equipo. Muchas veces, cometemos un error de perspectiva “los canteranos que llegan han de ser titulares” cuando la realidad del fútbol empuja a que si queremos asentar una idea de formación, los puestos de segundas espadas son a la larga, esenciales. La figura del “canterano suplente” debería de ser tan apreciada como la del genio que llega y se asienta en el once titular. Hoy, con Luis Enrique, se abre de nuevo la puerta del ascensor.

En el primer entrenamiento de Luis Enrique, a mediados de julio, revoloteaban una docena de nombres del filial: Patric, Diagné, Bagnack, Samper, Grimaldo, Munir, Sandro, Nieto, Joan Román, Adama, Dongou y el croata Halilovic. Menos de diez días después, eran ocho chavales los que continuarían la pretemporada con el primer equipo: Grimaldo, Adama, Sandro, Patric, Samper, Munir y Halilovic de los 12 que comenzaron y el central Edgar Ié. A estos, sumamos los dos que volvían de cesión, Deulofeu -Everton- y Rafinha -Celta de Vigo- y a Masip, que completará el trío de porteros de la primer plantilla. Once nombres para que Luis Enrique seleccionase su plantel. El ascensor parece volver a funcionar. El pasado lunes, en el Gamper, la última prueba para los últimos matices, participaron seis de estos once futbolistas: Masip, Grimaldo, Samper, Sandro, Rafinha y Munir. Luis Enrique decidió ceder a Deulofeu al Sevilla, nos mostró que Rafinha tiene altas posibilidades de ser el futbolista que su dorsal indica (12) y Munir parece el ojo derecho del entrenador asturiano. A Lucho se le ilumina el semblante con Munir. A día de hoy, 12 de los 23 futbolistas de la primera plantilla del FC Barcelona, son producto de la Masía. Todo indica que Samper, Halilovic y Munir son los siguientes en pulsar el botón del primer equipo. Que no vuelva a sonar la alarma de emergencia.