Después de la noche poco afortunada en París, el F.C. Barcelona visita uno de los barrios mas carismáticos de Madrid, Vallecas. El Rayo vive actualmente instalado en una zona tranquila de la tabla. Se olía la zona de descenso al principio de la temporada, pero después de sus victorias en casa ante el Athletic y en Valencia ante el Levante, se respira muy tranquilo -8 puntos en 6 jornadas, 4 por encima del objetivo de cada año que no debemos olvidar que es SALVARSE-. Cada año que se logra la permanencia, es un pequeño milagro en este barrio madrileño de la periferia. El curso pasado en Vallecas, los de Jémez fueron el primer equipo en mucho tiempo en ganarle la posesión al Barcelona, aunque quedó solo en un mero dato ya que los puntos, que es lo importante, se los volvieron a llevar a la ciudad Condal los blaugranas.

Lo que pasa cada verano en la Avenida de la Albufera no es algo normal, temporada tras temporada se cambia al equipo por completo -esta temporada solo repiten 8 jugadores de la Liga 2013/2014-. De los 24 jugadores que tienen ficha en el primer equipo, los 16 fichajes suponen el reto para Paco de tener que adapatarlos a su forma de jugar, nada fácil entendiendo que en el mundillo se habla de la adaptación como algo capital en este deporte y que cada futbolista suele necesitar un tiempo determinado de aclimatación. A día de hoy Paco Jémez todavía no ha utilizado a todos los jugadores de su plantilla en Liga, tales como Fatau, Amaya, Nacho , Jozabed, Embarba y Lass. Todos continuan sin pisar el terreno de juego en competición de momento, sea por causa física -Amaya- o sea por decisión técnica el resto. Y eso que el entrenador paga con rotación el error en el equipo o la  falta de implicación. No le tiembla la mano a Jémez cuando algo no le gusta y no duda en hacer sustituciones en cualquier minuto del encuentro si no está contento con el partido de algún jugador como ocurrió con Quini hace poco.

El estilo de juego del Rayo sigue siendo como el de las ultimas dos temporadas; muy ofensivo, arriesgado y tratando de llegar rápidamente, teniendo el balón, a la portería contraria. Estructurados en un sistema de 4-2-3-1 , intenta salir jugando el balón desde la portería, asumiendo ciertos «regalos» a los rivales, que realizando una presión adecuada logran recuperar el balón cerca de la meta contraria. En fase ofensiva el Rayo mete muchos jugadores en campo rival y adelanta la línea defensiva hasta medio campo, dejando muchos metros hasta el arco. De ahí su virtud y a veces su gran debilidad. Juegue contra quien juegue no cambia su identidad. Se podrá perder de goleada o con gol a ultima hora pero el juego seguirá siendo el mismo al siguiente fin de semana.

Si tuviera que hablar de jugadores clave en este esquema de Jémez, debería empezar por el cerebro, por el creador de juego que elige hacia donde se va a orientar el ataque y ese es Roberto Trashorras. Integrante de la Masia en su juventud, el gallego es el encargado de recibir la pelota siempre en salida de balón. Es el que mejor visión y lectura de juego tiene y la persistencia en la jugada con sus  continuos ofrecimientos, suele acarrearle tener siempre una marca cercana. Su pareja en medio campo esta temporada es Raúl Baena. El ex-perico es un opuesto en el juego al gallego ya que donde más destaca es en el ámbito defensivo y de intensidad, siendo poco destacable su técnica con el balón. Ellos dos han jugado todos los partidos de Liga hasta el momento y seguro serán fijos el sábado.

Dadas las rotaciones de Jémez es difícil en aventurarse en un once con el que jugará ante el F.C.Barcelona, pero hay que mojarse. La portería la ocupará Toño que alcanzó la titularidad por lesión del hasta entonces guardameta Christian Alvarez. En defensa se complica pronosticar, aunque apostaría por la línea que jugó en la victoria ante el Levante -Tito, Ze Castro, Ba e Insúa-. Del centro del campo hacia adelante, dada la buena forma de los que encaran a portería, será Alberto Bueno el 10 y el 9 Leo Baptistao. Mucha atención a ambos jugadores que vienen de hacer gol en las ultimas jornadas de Liga. Sobretodo del hispano brasileño, ya que su vuelta a Vallecas en busca de minutos está teniendo su recompensa en forma de goles las dos últimas jornadas y puede poner en problemas con su zancada a los centrales culés. Por último vayamos a los costados de Alberto Bueno, donde más que interiores juegan jugadores de banda. Esta temporada el Rayo ha incorporado a diversos elementos para ambas posiciones pero el que más me ha sorprendido ha sido Kakuta -jugador cedido del Chelsea- que lleva varios veranos pululando de cesión en cesión. Ha empezado la temporada en gran forma: participando en la circulación, con desborde, esfuerzo defensivo… Es muy rápido, no exento de calidad e incluso se le ha visto afortunado de cara a portería -2 goles-. En la otra banda, en la derecha, radica la mayor incógnita del once. Si bien empezó muy muy bien Aquino, volviendo loca a la defensa del Atletico en la primera jornada, en los últimos partidos ha sido el portugués Licá quien ha ocupado esa demarcación. Viniendo de dos buenos resultados creo que será el propio luso quien juegue de inicio aunque con Jémez apostar por un 11 fijo cada fin de semana, se antoja una quimera.

El choque de estilos «similares» que se verá en Vallecas el sábado a las seis de la tarde promete buen espectáculo. Las últimas temporadas han regalado al espectador una buena cantidad de goles, aunque la gran diferencia de calidad entre los dos equipos es abismal. Desde que ascendió el Rayo no ha podido hacerle un gol a los culés en Vallecas, lo que será todo un reto para los madrileños, convertirse en el primer equipo de la Liga que lo logre. En estos partidos ante los grandes equipos el Rayo suele desplegar buen juego penalizado en el resultado por los errores individuales, que ante jugadores de talla mundial como los que tiene el F.C Barcelona suelen pagarse muy caros. A favor o en contra del Rayo es que venimos de jornada europea. Partidos muy seguidos con poco descanso o pagar los platos rotos de París, según sea el resultado se interpretará.

Algo que puede ser negativo para el Rayo es que este año no será como el pasado donde Martino planteó un partido más de contraataque. No creo que Luis Enrique lo haga así ya que querrá dominar el balón y eso al Rayito no le va a venir bien. Intención de dominar con la defensa arriba y jugar en campo contrario, veremos si le toca jugar o no en su campo. Con el objetivo de competirle al Barça, como hizo ante el Atlético la primera jornada, esperemos que pueda pelearle el partido y no caer tan estrepitosamente como las últimas temporadas.