Cayó la 24ª. El camino se volvió largo y tortuoso, pero un meritorio parcial de veinticuatro goles a favor por cero en contra permitió el pleno de victorias en los cinco últimos partidos. Mordisco a mordisco, el Barça ganó su sexta liga de las últimas ocho a lomos de Luis Suárez.

El partido tuvo poca historia. Los culés resucitaron la semana pasada contra el Espanyol y fueron ahora muy superiores en Los Cármenes, que presentó un césped que intentaba trabar el juego visitante y acabó perjudicando a los intereses locales. Tres goles del ‘pichichi’, Bota de Oro y hasta ganador de Eurovisión si se lo propusiera, mandó hacia las vitrinas del Camp Nou un campeonato inesperadamente emocionante y sufrido.

Tras batir el récord de partidos sin conocer la derrota, se perdió como no se hacía desde tiempos de Gaspart. El Mundial de clubes, la falta de banquillo, el calendario, algo de autocomplacencia y posterior falta de confianza… vaya usted a saber los motivos. El caso es que se dilapidó una gran ventaja cuando parecía hecho, pero al final se remató la faena.

Luis Enrique, pues, suma y sigue como comandante de la nave. Tanto, que habrá que respetar a quien piense que forma parte del podio de mejores entrenadores de la entidad, solo por detrás de quien subió a los cielos hace semanas y de quien se despidió de Múnich el mismo día que Messi y compañía volvían a hacerse con el trofeo de la regularidad.

El Barça salió en Granada con el once de Berlín, que dominó el partido amoldándose a las condiciones ante unos recién salvados que ofrecieron poco más que cierto orden en su mitad de campo y una dureza en sus acciones defensivas por encima de lo deseable.

Los laterales volvieron a asistir al cañonero uruguayo en los dos primeros tantos y Neymar le puso en bandeja la sentencia. Iniesta bordó el fútbol por momentos y Mascherano se lesionó, aunque esperamos que esté a punto para la final copera. Será dentro de una semana cuando los azulgrana estén en disposición de firmar una de las seis mejores temporadas de su historia. Mientras tanto, disfruten de la merecida consecución de esta liga.

LAS NOTAS

Ter Stegen (7): Atento con pies y manos. Si nada se tuerce, es el futuro de la meta culé.

Alves (7): Pesará para bien cuando de verdad importe hasta el último día.

Piqué (7): Concentrado y peligroso en el balón parado.

Mascherano (7): Otro gran partido que reafirma su mejor temporada en el club.

Alba (7): Importante abriendo la lata y asentando el dominio en la mitad de campo granadina.

Busquets (7): Su mejor momento del curso quedó atrás, pero en su sostén inmejorable. Hoy, sin alardes, volvió a demostrarlo.

Rakitic (6): Voluntarioso y solidario como siempre, aunque sin el acierto técnico de otras tardes.

Iniesta (8): El manchego se coló en la fiesta de ‘Luisito’ con grandes momentos. Ha realizado la temporada más regular que se le recuerda.

Messi (6): Un bien, a secas, por lo extremadamente superior que es a los demás. Sumó hoy y lo hizo en el global de la liga. Sin él, el metal se tocaría con menor frecuencia.

Neymar (7,5): A última hora, ha recuperado sensaciones. Que las mantenga en el Vicente Calderón.

Luis Suárez (10): 40 goles que decidieron partidos clave y mantuvieron al equipo vivo en todo momento, también cuando Messi causó baja. La liga 2015/16 lleva su sello.

Mathieu (5): Entró con el pescado casi vendido y, esta vez sí, cumplió con su labor de evitar sustos.

Arda (5): Correctos minutos del turco, que deberá dar un paso adelante en el futuro.