Cuando el Barça fichó a Paulinho parecía que hubiera llegado un jugador de regional, con muchos aficionados del club tratando al jugador con desdén o mofas ya desde su presentación. El descontento de los fans hacia el club (con motivos más que de sobra) por un mercado de verano lleno de falsas promesas se transformó en rechazo hacia alguien que aún no había ni debutado con el equipo.

Y de momento solo ha jugado los minutos de la basura ante el Alavés, claro. Pero más allá de su precio, edad o liga de la que proviene, el desprecio viene de motivos extradeportivos. El jugador en sí no tiene culpa de nada por querer venir al club. Se puede comentar que no es lo que necesita el Barça, que habría venido mejor un interior creativo que un box-to-box o que puede quitar minutos a otros jugadores con más proyección, pero no que sea mal jugador.

Digo esto porque creo firmemente que va a acabar jugando muchos minutos esta temporada si nada se tuerce. A buen nivel, mejora a la mayoría de centrocampistas de los que dispone Valverde. No te va a mover el balón como Verratti, pero es ese tipo de jugador que te puede desatascar un partido complicado con un gol. No es titularísimo con Brasil porque sí. Es un gran llegador con pegada y físico, que también hay que decir que suena poco “Barça”. Pero son otros tiempos.

Xavi no está e Iniesta es como si no estuviera, así que hay que adaptarse a lo que hay. Sería una decepción que Sergi Roberto no acabara siendo titular esta temporada, pero en cuanto al resto de interiores… bueno, veamos: el rendimiento de Rakitic ha sido decepcionante estas últimas temporadas, Rafinha sigue lesionado, Denis Suárez siempre parece que va a dar un salto cualitativo pero no lo acaba de dar, André Gomes no suele estar y no sé si se le espera y Arda Turan ni está ni se le espera.

Hay muchos jugadores, pero pocos que puedan ser titulares indiscutibles. Por esa razón Paulinho va a tener una oportunidad y creo que el equipo lo va a agradecer. Algunos apuntan que también puede sustituir a Busquets, pero me da la sensación de que su actuación ahí sería como la de Rakitic o André Gomes la temporada pasada: cumpliría, pero no es su sitio. En un doble pivote sí tendría más sentido, aunque es difícil saber si el Txingurri usará a menudo este sistema durante la temporada. En todo caso hablamos de un jugador polivalente, de los que gustan a los entrenadores para dar amplitud a una plantilla.

Al final parece que es mucho más fácil pensar en el nuevo 15 del Barça como “ese tío” que no sabe dar dos toques seguidos con balón por un vídeo sesgado de Twitter, “ese tío” de la liga china o “ese tío” al que los aficionados del Tottenham no quieren volver a ver. Pero creo que cuando uno ve más allá, ve a un buen jugador. Y eso es lo que debe contar.