El fin del ‘caso Palmarsson’ catapulta las opciones del Barça en Champions

Como ya avisamos, era lógico que el Barcelona se lanzara a por el islandés dadas las circunstancias actuales; la recaída del joven Lasse Andersson en su lesión de rodilla dejaba al veterano Raúl Entrerríos como único central puro de la plantilla de Xavi Pascual y, con Palmarsson cerrado para el año que viene, no tenía sentido hacer aparecer a un cuarto central en escena que no pudiera seguir de ningún modo la temporada que viene. Se espera que el Barcelona desembolse unos 700.000 euros por el islandés, cerca del millón que pedía el Veszprem, su equipo hasta esta temporada, lo que dejaría este fichaje como el quinto más caro en la historia del balonmano.

¿Qué se puede esperar ahora? ¿Qué ocurre cuando uno de los mejores equipos, presente en la final a cuatro de 2017, ficha al mejor o a uno de los mejores jugadores? Pues que ahora el Barça Lassa es más candidato a todo, si cabe. El Barcelona era de los equipos más compactos sin, quizá, una gran estrella de renombre. Pues ahora tendrá también eso, por lo que es de esperar otra presencia en la Final Four de Colonia y optar a la Champions League.

¿Y qué se puede esperar de Aron Palmarsson? El islandés es un central de clase mundial, quizá el fichaje más sonado de la sección desde la llegada de Karabatic, por encima mediáticamente del de Filip Jicha. Al contrario que el francés, un central con un físico exuberante e imparable en carrera, Palmarsson es mucho más creativo y talentoso, con mejores manos. Pese a que el islandés también posee un físico privilegiado, no costará ver que esa no es su mayor virtud. Palmarsson también es un gran tirador de larga distancia, sus lanzamientos son potentes y muy colocados, y es efectivo con un pie en el suelo, con los dos y también en suspensión.

Lo cierto es que el Barcelona estaba madurando el fichaje de Palmarsson, ante las altas pretensiones económicas del Veszprem húngaro, un poderoso y rico equipo que no necesitaba vender así que no tenía ninguna obligación de dar su brazo a torcer. Los azulgranas, por su parte tenían la posición bien cubierta, con Entrerríos y Andersson, que debía volver este mes de octubre, con la ayuda del talentoso lateral esloveno Dolenec mientras el danés seguía recuperándose. Pero la recaída de Andersson cambió las reglas del juego y el Barcelona debía buscar un central con cierta urgencia. Ahí, por lo explicado anteriormente, y como ocurre con Roma, todos los caminos llevaban a Palmarsson.

El fichaje llega poco después de la primera derrota de la temporada. Fue ante el Vardar de Skopje, campeón de la Champions la pasada temporada y por tan sólo tres goles, un ‘average’ en principio recuperable para que el Barcelona pueda ser primero de su grupo. Por cómo fue el partido, en el que los macedonios fueron superiores, más intensos y mucho más metidos en todo momento, con cierta permisividad arbitral, el 27 a 24 final no es un resultado desastroso ni mucho menos.