Dicen que recordar es volver a vivir. Hoy, en víspera de la final de Copa que enfrentará mañana a Barcelona y Sevilla si echamos la mirada atrás vemos el dominio del Barcelona en los últimos años en el torneo del K.O.

La de mañana será la octava final disputada por los azulgrana en los últimos diez años dejando un balance las siete finales de cinco títulos y dos derrotas, ambas frente al Real Madrid en Mestalla con el cabezazo de Cristiano Ronaldo y la cabalgada de Bale frente a Bartra.

Pero si se trata de recordar las victorias, todas han tenido sus detalles,golazos, aspectos tácticos o partidos con sabor a despedida.

¿Cómo no acordarse del gol de Messi frente al Athletic de Bilbao en el Camp Nou? Aquel día el Barcelona en la primera temporada de Luis Enrique aún con la final frente a la Juventus por disputar vencía al Athletic con un resultado de tres (Messi x2 y Neymar) goles a uno pero que será recordado por el gol de Messi que abría el marcador.

La segunda de Luis Enrique (2016) nos dejó a un Barcelona que venció al Sevilla por dos goles (Jordi Alba y Neymar) a cero después de quedarse con un hombre menos en el minuto 36 de la primera parte. Además al poco de comenzar la segunda parte Luis Suarez caería lesionado teniendo que dejar su lugar a Rafinha. En la prorroga con un Messi en modo asistente, el Barcelona consiguió evitar el gol de un Sevilla que venía de ganar la Europa League y acabó levantando la Copa que significaría un doblete.

El Vicente Calderón fue testigo de las despedidas tanto de Luis Enrique como Guardiola. Luis Enrique lo haría levantando la Copa del Rey el año pasado frente al Alavés y Guardiola (2012) lo haría después de vencer al Athletic de Bielsa por tres goles (Pedro x2 y Messi) a cero en un partido con poca historia en el que el Barcelona se adelantó en el minuto 3 por mediación del jugador canario y lograría el 3-0 con tan solo veinticuatro minutos disputados de partido.

Pero si me quedo con una, es con la de 2009 en aquel histórico mes de Mayo. El Barcelona después de años de sequía se enfrentaba en Mestalla al Athletic de Caparrós que volvía a una final copera. Los de Guardiola llegaban al encuentro con con las bajas de Iniesta o Henry entre otros jugadores y tuvieron que remontar el gol de Toquero en el minuto 9 de partido. Sería Yaya Touré que aquel día tuvo que jugar de central el que lograse el empate a trece minutos del descanso. Con el 1-1, en la segunda parte, Messi primero y Bojan y Xavi al transformar una falta pondrían en el marcador el 4-1 con el que el Barcelona volvería a levantar la Copa.

Aquel partido permitió ver a un Busquets al que no le pesó la juventud pese a que meses atrás se encontraba jugando en Tercera División y también dejó como nota destacada la presión que ejerció el Athletic de Bilbao y como los centrales del Barcelona se situaban prácticamente en línea de fondo cuando Pinto debía sacar de puerta. El 1-3 una de las jugadas destacadas del partido con un contragolpe bien ejecutado con un buen pase de Messi para que Bojan marcara su quinto gol en la Copa del Rey.