Apostar por la incertidumbre

@ivanofde

 

Cuando todo parece discurrir por los raíles de una realidad más o menos segura, cuando todo parece ir por donde tú más o menos quieres, todo se hace más aparentemente seguro. Pero claro, decir estas cosas en algo dominado por la tendencia al caos… es cuanto menos arriesgado.

En Abril, casi Mayo, de 2020, sin saber aún si el fútbol se va a reanudar, o sin saber si los clubes van a poder fichar, tenemos que hablar de una de las mayores urgencias del FCB, el relevo de Gerard Piqué, y todo ello apoyado, en la inestimable ayuda de nuestra amiga la incertidumbre.

 

La “certeza”

 

La temporada 2019/2020 empezaría en clave defensiva con el fichaje de Junior y el rechazo del que parecía ser uno de nuestros fichajes estratégicos, De Ligt. Con este no fichaje, el FCB se presentaba con dos únicas certezas, Piqué y Lenglet, acompañados de un dudoso Umtiti y una apuesta como Todibo. El problema del equipo empieza a residir en que Piqué empieza a dejar de ser certeza, y por tanto, a perder un valor top mundial que en plantilla no se atisba, por ello, ¿es hora de apostar en una de las posiciones más difíciles del panorama actual?¿Es hora de mirar a donde hace tiempo se mira poco? Vamos allá.

 

El central que necesitamos

 

El tema de esta demarcación siempre ha sido ampliamente debatido, primero cuando estaba Mascherano, el cual fue dueño de dicha posición mucho tiempo, luego cuando la gente recelaba de Pique, y aunque con la explosión de Umtiti todo se calmó, su lesión crónica unida al paso de los años, vuelve a hacer aflorar esos miedos internos. Pero, ¿Qué debe tener el central azulgrana?

 

Jugar con el vacío

 

Si algo se le va a pedir a nuestros centrales, o al menos deberíamos pedirle, es saber gestionar grandes superficies de campo a sus espaldas, saber manejar las diferentes situaciones de una jugada que puedan traducirse en transiciones ofensivas agresivas y verticales, que si algo buscarán, será la espalda de nuestros guardianes.

Mirando a la cantera, voy a describir a los tres centrales con mayores posibilidades:

·       R. Araujo: Es quizás el central más hecho, competitivo y “fácil” de poner en una rotación del primer equipo. Y centrándonos en este apartado, es quizás el más aventajado de todos. Con sus 191 cms de altura, pose una capacidad en su arrancada y una velocidad en larga absolutamente diferencial. En 2B, no hay rival que por físico pueda hacerle rival, y no solo en corpulencia, en velocidad igual. Su capacidad para recuperar es abrumadora. Otro aspecto clave, es su capacidad de manejar envíos largos, donde aunque sigue siendo el mejor, se le notan sus años, ya que a veces peca de demasiada agresividad.

 

 

·       Cuenca: Un central tan bonito como con interrogantes. De zanacada larga y muy veloz en larga, le cuesta algo más en espacios cortos que a Araujo. Su capacidad aérea defensiva tiene mucho margen de mejora, y no porque su nivel actual sea bajo, es que simplemente es y va a ser muy bueno ahí, Cuenca tiene sensibilidad para el despeje de cabeza adelantado, pero a veces no mide demasiado bien.

·       Mingueza: Aunque su exuberancia física es menor a los anteriores, es un central cuya defensa se mide más en el posicionamiento. Sabe medir y situarse para anticipar, aunque cuando se tiene que recuperar posiciones corriendo hacia detrás, no es tan veloz como el resto. Vendría a ser, una tipología de central como Piqué. En la defensa de balones largos, se muestra contundente y sereno, pese a que tampoco es infalible ahí.

 

El balón en tus manos

 

El tema de la salida de balón se ha tornado en piedra filosofal en la idiosincrasia culé, aunque por los pitidos, pareciera que no nos gustara el riesgo. Es por ello, que ante presiones adelantadas tan feroces y bien estructuradas, es un tema que ha marcado, marca y marcará diferencias.

·       R. Araujo: Si en el anterior apartado, Araujo era el más destacado, en este, es quizás el que más flaquea. Aunque no es el uruguayo de hace 2 años, su pie no es tan creativo a la hora de pasar. Los pases a veces son demasiado tensos e incluso altos, faceta que está puliendo poco a poco. Pese a su capacidad física, le sigue costando conducir para atraer y dividir, algo fundamental.

·       Mingueza: El central más académico de los tres, no es tema baladí que sea el canterano de mayor recorrido. Con una alta capacidad para esperar y dividir, o conducir para atraer y soltar. Se ha tornado como un gran jugador en salida de balón, pese a su creatividad “media”.

·       Cuenca: Quizás el central con el pie más exquisito y creativo de los que se encuentran en la Masía, e incluso me atrevería a decir que hacía tiempo que no se veía un central así en el B. Tuvo una temporada anterior bastante dura, donde pareciera que jugaba mejor en 2ª que en 2B, pero esta temporada ya ha empezado a asomar la patita. Su capacidad para conducir se está elevando, así como su atrevimiento. Sus pases laterales son precisos, así como tenso los interiores. Sus cambios de orientaciones son cosas que debe potenciarse porque tiene talento para ello.

 

Los flancos y el núcleo

Por último, y quizás en el último orden de preferencia, la defensa del área y la capacidad para salir a las bandas, posiblemente la faceta que más le cuesta a Piqué y que más daño nos ha hecho en los últimos tiempos.

·       Cuenca: El año pasado el central madrileño tenía grandes lagunas cuando le tendían el cebo en el costado, su timing y sus persecuciones eran ineficientes, sin embargo, su capacidad de concentración y lectura de movimientos ha crecido (mucho) y dicha faceta ha mejorado bastante. Tiene margen ahí, pero herramientas para ello. En cuanto en el área, suele actuar un poco más por improvisación que por lectura idónea de su posición. Sin embargo, tiene un gran talento para el despeje, el uso de la pierna en el corte y la defensa de centros más frontales que laterales.

·       Mingueza: Es un jugador muy sobrio en todas las acciones, aunque sí que es verdad que su falta de velocidad algunas veces le impide cosas que su lectura no le permite. En el área es bastante ordenado y sabe leer los movimientos de distracción, sin embargo aún le cuesta ser ese káiser al que agarrarse.

·       Araujo: Si corriendo hacia atrás era un bicho, no lo iba a ser menos hacia los lados. Es templado cuando sale a banda, pero enérgico si va a ella. Arrolla y avasalla, expulsa hacia afuera la amenaza. En el área es el mejor, tanto defensiva como ofensivamente. No sé si tiene el talento para el despeje que si puede desarrollar Cuenca, pero es una torre en todas las facetas dentro del área, siendo diferencial tanto en la defensa, como en la faceta ofensiva, donde es una absoluta locura

 

El central que no existe

 

Ser central es quizás la posición más dura para un joven del panorama actual. El delantero suele empezar a despuntar ya mayorcete, con un nivel de intepretación de movimientos muy alta, cosa muy difícil de gestionar e interpretar por los centrales más jovencuelos.

Es por ello, que la inclusión de un canterano en esta posición suele ser muy problemática, máxime si se va a depender de él para paliar déficits de una plantilla tan potente como compleja en su encaje y máximo rendimiento. Lo que sí está claro, es que el FCB tiene en la cantera centrales para dar un paso al frente, aunque no sea tan a corto plazo. Paciencia con ellos….