El fútbol se mueve muy rápido. Hace dos semanas el Barça estaba resacoso tras ganar la Copa del Rey ante el Athletic de Bilbao en un muy buen partido coral y, se enfrentaba al Granada para por fin igualar el calendario ante sus más directos rivales por el título. Una victoria ante el conjunto nazarí, plagado de bajas en el Camp Nou, les colocaba como líderes de la competición a falta de cinco jornadas. Ni siquiera necesitaría ganarle al Atlético de Madrid, pues con un simple empate continuarían mirando la clasificación desde las alturas. Sin embargo, como todos sabemos, un par de jugadas desafortunadas llevaron al Barcelona a tirar una liga, que nunca pareció ser suya. La temporada acabó hace dos jueves. Y con la temporada acabada, toca hacer balance y repensar que necesita el Barça del futuro. Un Barça que hoy en día va corto incluso en la Liga española más débil en 20 años.

Y con esto, lanzamos tres prioridades fundamentales pero que difícilmente se darán a la vez ante los problemas económicos y contractuales. La llegada de un gran técnico, el fichaje de un central de jerarquía o la compra de un 9 top. Si solo se pudiese cumplir una, ¿cuál sería?

ENTRENADOR

Los méritos de Koeman ya han sido expuestos con anterioridad. Con el asterisco del año sin público, el equipo entrenado por el neerlandés ha sido el peor Barça local desde los años de Serra Ferrer. Como diría Bernd Schuster: “no hace falta disir nada más”.

Además, su balance en grandes partidos es catastrófico y la mentalidad del equipo sigue siendo un problema. Ahora bien, ¿existe un entrenador fichable capaz de voltear esta situación?

Valverde, Setién y Koeman han tenido su propio “Anfield” en repetidas ocasiones. Ante esta situación, urge plantearse si el Barça necesita un técnico que sea capaz de crear sinergias entre los jugadores, elevar su rendimiento y cambiar su mentalidad o si bien, tras tantos desalientos y con muchos partidos en la cabeza, la plantilla del Barça se llevará por delante al técnico que entre, sea cual sea. Es decir, es problema técnico, del grupo o ambos. La herencia envenenada de Bartomeu hace imposible dar un gran número de bajas por lo que todas las miradas apuntan al banquillo culé; en tiempos pasados espacio de calma y tiempo, hoy en día una trituradora de entrenadores que parece buscar vacante. Xavi, García Pimienta o incluso Jordi Cruyff se postulan. ¿Levantará alguno el ánimo del Camp Nou?

EN BUSCA DEL 9

Tras la salida (necesaria) del mejor 9 de la última década el Barça busca un acompañante de Messi, siempre que el astro argentino decida quedarse. El 2021 de Leo Messi es, en mi opinión, muy meritorio, pero sin embargo echa en falta la figura de un 9 que le fije centrales, le ponga de cara y actúe de escudero goleador. Depay o el Kun Agüero no parecen ser ese tipo de jugadores por fútbol el primero y por físico el segundo, por lo que la duda es, ¿debería el Barça fichar a coste cero a algunos de estos delanteros o vendrían a ser jugadores redundantes de difícil encaje como Griezmann?

Está claro que el Barça necesita algo arriba pero quizá no está en posición de conseguirlo.

EL CENTRAL

Si algo ha matado la temporada del club blaugrana en el césped ha sido sin duda la fragilidad defensiva. Las irrupciones de Mingueza y Araujo son grandes noticias, pero la anticompetitividad de Lenglet y Umtiti, más la merma física de Piqué han supuesto un lastre excesivo. El fichaje de Éric García parece cercano; con el ex canterano, Óscar Mingueza y Araujo el Barça nutrirá su zaga con tres centrales jóvenes y prometedores. Sin embargo, todos manejan la pierna derecha y algunos como Ronald Araujo tienen un físico dudoso debido a las lesiones. Si Piqué ha comenzado la cuesta abajo como parece, la defensa volverá a ser un punto débil ante la acumulación de centrales jóvenes y del mismo perfil (derecho), obligando probablemente a seguir utilizando a jugadores tan tendentes al fallo como Lenglet y con poca capacidad para defender hacia delante. Hace falta un jerarca, como antaño fue Gerard, que acompañe a los jóvenes y el Barça no parece que lo vaya a tener.

Visto lo visto, cuál necesidad os gustaría que el club solvente este verano: central, entrenador o el ansiado nueve.