Era inevitable. Sabíamos que tarde temprano llegaría este día y con ello las despedidas y artículos como este pero probablemente nadie imaginaba un final así y quizá solo unos pocos un destino como el PSG. Yo quizá ingenuo pienso que el destino ha venido provocado por los acontecimientos y que el final se haya producido ya comenzado Agosto ha provocado que equipos como el Manchester City lo hubiesen descartado y planificado otras operaciones pero ahora y más aun escuchando a Messi sus ganas de seguir compitiendo entiendo es un lugar en el que puede cumplir sus objetivos y expectativas.

Esta todo muy reciente y quizá aún nos quedan momentos y sensaciones por vivir como los primeros partidos sin él, verlo marcar goles con otra camiseta o quien sabe si el destino caprichoso lo hará visitar el Camp Nou.

Su marcha marcará un antes y después en el Barcelona. Tenerlo era afrontar los partidos con una dosis de tranquilidad, una vida extra sabedores de que en cualquier momento podía marcar las diferencias incluso en los días más grises ya sacándose algo de la chistera o convirtiendo en gol alguna falta. Había perdido algo de desborde pero seguía siendo capaz de sacar un pase de escuadra y cartabón.

Fueron muchos años y muchas alegrías lo que hace que los recuerdos sean también muchos. Tantos que cuando uno trata de recordar o de hacer una lista siempre se olvida alguno o aparece alguna anécdota o partido que merece ser recordada.

¿Cómo olvidar su partido en Stamford Bridge volviendo loco a Del Horno cuando aun apenas lo conocían en Europa o aquel hat-trick frente al Real Madrid? Una vez superados los problemas burocráticos para inscribirlo, Messi dejó imágenes y recuerdos desde el principio. Incluso antes, como siendo un cadete, aquel tímido jugador que tuvo que jugar la final de la Copa de Catalunya con la misma máscara que unas semanas antes había llevado Puyol. Se cuenta que a los pocos minutos de empezar el partido, Messi acudió al banquillo para hablar con el entrenador Alex García y explicarle que no veía bien y le era incómoda. El técnico le planteó sustituirlo y la contestación de Messi fue que seguía un rato en el campo a la vez que se deshacía de la máscara tirándola al banquillo. En cinco minutos, del 18 al 23, Messi dejó prácticamente sentenciado el partido y el técnico lo sustituyó en el descanso con 3-0 en el marcador gracias al tercer gol marcado por Piqué.

Empezando por los goles, creo que me quedaría con el que marca en la semifinal de Champions frente al Real Madrid pero, ¿cómo olvidarse de los que le marca al Bayern también en semifinales, que se lo pregunte a Boateng? ¿su primer gol y la celebración con Ronaldinho? ¿el que le marca al Getafe? ¿ El gol a Estudiantes en la final del Mundialito y la posterior celebración? ¿O los que marca en las finales de Roma y Wembley? Vaya salto para batir de cabeza a Van der Sar.

Han sido 672 goles de todos los colores que en muchas ocasiones han generado reacciones o definiciones realmente originales o que definen la figura de Messi. Recuerdo esta de Albert Morén (@eumd) tras un gol frente al Villarreal: Una buena manera de contarle a los nietos quien era Leo Messi será enseñarles sus goles con la derecha y añadir: “Pues esta era la mala”.

Sus propios compañeros han dejado reacciones durante los propios partidos o en alguna entrevista donde se puede apreciar que estábamos ante un jugador diferente. “Leo, a veces me pregunto si es humano” explicaba Henry hablando de Messi y una acción en un gol frente al Málaga.

Otra cosa que sucede con Messi es que recordamos con facilidad donde vimos un partido determinado como pudiera ser la exhibición en La Romareda en la temporada 2009-10. Messi ha hecho mejores a compañeros, rivales y también ha provocado planteamientos de sus entrenadores enfocados a explotar sus virtudes o de los rivales para tratar de minimizarlas. De alguna manera me atrevería a decir que Messi ha mejorado el fútbol y a muchos futbolistas Para el recuerdo queda cómo se entendía con Dani Alves, la compenetración más reciente con Jordi Alba o la delantera formada con Neymar y Luis Suarez. A nivel táctico quizá el ejemplo más claro es el 2-6 en el Bernabeu que después tuvo continuidad en más partidos.

El recuerdo de Messi el día de mañana no será los títulos que ha ganado. Que si una liga más o una liga menos, seis o siete balones de Oro. Conscientemente he evitado entrar en estadísticas  y solo he hecho referencia al número de goles. Me parece en este caso algo secundario. El recuerdo de Messi el día de mañana es todo lo que nos ha hecho vivir y lo felices que hemos sido.

A veces recordar es volver a vivir, infinitas gracias Leo!