Es este un tema recurrente en el que se podría profundizar mucho hablando caso por caso y debatir sobre hasta qué punto las decisiones de Koeman son fruto de la necesidad o si realmente es un entrenador al que no le cuesta dar la alternativa a los jugadores jóvenes.

Los más críticos o detractores del técnico holandés utilizarán ese argumento y probablemente pondrán los nombres de Riqui Puig o Collado encima de la mesa, olvidando los de Pedri, Mingueza o Ilaix, entre otros. Y es que si se analiza de forma global el balance a día de hoy es que los jóvenes han contado con muchos minutos. Sea o no por necesidad es importante que la gestión sea adecuada, y aunque son jugadores ya de primer nivel son susceptibles de ser considerados en formación o más sensibles en lo que se refiere a aspectos como la confianza o la gestión del error. También intentaré poner encima de la mesa de debate un aspecto como puede ser la importancia de que algunos de ellos disputen minutos y no ser solo parte de la dinámica del primer equipo.

A la memoria me viene el caso de Juan Miranda (ex-canterano del Barcelona y actual jugador del Betis), sustituido por Ernesto Valverde en el descanso en un partido frente al Levante y que posteriormente pasó al ostracismo.

En casos como este y para este tema me gusta recordar unas palabras de Marcelo Bielsa en las que afirmaba: “Es fácil poner jugadores jóvenes y acrecentar la lista de debutantes. Lo que hay que hacer es poner jugadores jóvenes y que no fracasen”.

Estos jugadores fallarán o tendrán días menos afortunados, pero sería un error señalarlos públicamente o quizá querer ir demasiado deprisa si realmente no están preparados. Son aspectos que un entrenador debe tener presente y más aún si cabe en un club tan expuesto mediaticamente como el Barcelona. Haría hincapié en el caso de Eric García, en el que Koeman parece que confía pero que ya ha dejado algunas dudas en el partido frente al Athletic Club. Una respuesta en rueda de prensa desafortunada o un mal gesto puede dañar la confianza del jugador, por lo que es importante tener especial cuidado tanto en los días malos como en los buenos.

Se hace especialmente importante el trabajo y la relación del día a día y cómo el cuerpo técnico pueda ir corrigiendo fallos, puliendo los aspectos a mejorar y explotando las virtudes de cada uno de ellos.

Para todos ellos también considero importante tener presente en todo momento la edad que tienen, y por ello tampoco podemos exigirles que todos los días esten tirando la puerta. Eso solo está al alcance de unos pocos.

Las últimas semanas y el final del mercado de fichajes (con la salida de Pjanic e incluso la de Emerson que llevarán a Sergi Roberto a volver a ser opción en el lateral derecho) han hecho que Nico Gonzalez y Gavi parezca que puedan tener más protagonismo del esperado. Es una situación que puede generar ciertas dudas a la hora de si deben jugar en algún momento con el filial o si a pesar del dorsal van a ser jugadores al cien por cien en dinámica del primer equipo. ¿Compensa que en la medida de lo posible si no han jugado el sábado cuente Sergi Barjuan el domingo con ellos? Será algo a lo que también prestar atención y un buen indicativo de hasta qué punto cuenta Koeman con ellos, especialmente con Nico, que parece puede ser el sustito de Busquets cuando Koeman quiera darle descanso. Otra opción podría ser De Jong y que en la posición de interior contase con Coutinho o con el propio Gavi. El rendimiento al final será el que marque estas decisiones.

En una situación diferente se encuentra el austríaco Yusuf Demir, que a priori llegaba para ser jugador del filial y finalmente dispondrá de dorsal del primer equipo, lo que imposibilita cualquier opción de disponer de minutos cuando el técnico haya recuperado efectivos en la delantera. Desde fuera esta decisión me parece cuestionable, ya que si bien es síntoma de la confianza del entrenador reservarse esa opción podría haber resultado interesante en un futuro y también pensando en la posibilidad de disponer de fichas libres en el mercado de enero.

Otro nombre que me parece interesante e incluso necesario poner encima de la mesa es el de Alejandro Baldé, que tuvo un protagonismo positivo en la pretemporada y parece haber pasado a un segundo plano, pero no debemos olvidarnos de él. Además debido a la situación y los precedentes en el lateral izquierdo hacen que sea un jugador y una gestión sobre la que prestar especial atención.

Jordi Alba a día de hoy ya no está para jugarlo todo, pero más allá de eso será inevitable que a lo largo de la temporada sufra alguna lesión o sanción. Cuando llegue ese momento Koeman podrá optar por distintas soluciones (cambio de sistema o utilizar a Dest o Sergi Roberto) que en parte dependerán de la confianza que tenga en el jugador. Para ello sería positivo que en la medida de lo posible y si Koeman lo ve preparado el jugador pudiese ir disputando minutos en encuentros que inviten a ello bien con marcador a favor o rivales más asequibles.

No me olvido tampoco de Riqui Puig, quizá la asignatura pendiente o el lunar negro en lo que respecta a Koeman y cómo ha contado con los jóvenes. Es de esas situaciones en las que me gusta resaltar que probablemente nos falta información o poder ver los entrenamientos, pero a día de hoy la realidad es que en esta temporada ha contado antes con “Gavi” que con él y que los últimos entrenadores del Barcelona no acabaron de apostar por Riqui. Algo hay que probablemente se nos escapa para que no haya sido así, ya que viendo la predisposición de Koeman a contar con los jugadores jóvenes no hay nada que nos haga pensar que no lo haría también con él.

Como vemos el abanico de jugadores jóvenes es amplio. Además, Araujo (22), Mingueza (22) y Ansu (18) son jugadores a los que también incluiría por distintos motivos en una situación a la que prestar atención a cómo los utiliza y gestiona Koeman esta temporada. Y quién sabe, quizá a mitad de temporada ya han asomado la cabeza de alguna manera al primer equipo Arnau Comas, Abde o algún otro jugador del filial.