Rolands Smits o algo más

Febrero. Febrero es ese mes en el que la gente ya recupera su ritmo de vida normal tras las Navidades, cuando los más románticos sacan lo mejor de su repertorio para San Valentín y los más creativos ya piensan en qué disfrazarse para Carnaval. Baloncestísticamente hablando el segundo mes del año siempre suele marcar un punto de inflexión en la temporada de los equipos, pues se disputa el primero de los tres grandes títulos de la campaña, es cuando se cierran las plantillas con las que has de competir hasta junio y cuando ya se empiezan a perfilar posibles incorporaciones de cara al verano, intentando adelantarse a la competencia.

Pero antes de entrar hay que dejar salir y ahí es donde tiene primero trabajo Juan Carlos Navarro y su equipo, pues tendrá que decidir el futuro de algunos jugadores cuyos contratos expiran antes de acometer alguna operación. Obviamente la cuestión central será la continuidad o no de Brandon Davies, pero no es el único jugador que acaba su vínculo con el Club. Nigel Hayes y Rolands Smits también finalizan en 2022 y que sigan o no dependerá de cómo respondan de aquí a final de temporada, por supuesto, pero igual el Barça ya tiene medio pensado qué hacer con ellos.

Es razonable pensar que en el caso del americano el Barça pueda buscar algo mejor en el mercado pese a que su rendimiento está siendo muy digno, pero no fue la primera opción el pasado verano y seguramente no lo sea este. Mucho más complejo es el caso del ala-pívot letón.

Su esfuerzo y trabajo está fuera de toda duda, pero es verdad que su rendimiento cayó en el último tercio de la pasada temporada y nunca ha acabado de encontrar las buenísimas sensaciones que dejó en sus primeros meses con Saras. Entonces daba un descanso de calidad a Mirotic, aportaba intendencia, solía ser certero en sus tiros y además apuntaba a cosas mayores. Desde ese bajón su nivel ha sido mucho más irregular y esa sensación de poder ser algo más que lo que veíamos se ha esfumado bastante. Y durante el bache que atravesó Mirotic no dio un paso firme al frente.

El Barça ha de plantearse su renovación consciente de que Rolands Smits es y seguramente va a ser lo que ahora vemos, no más, y de las expectativas del Club para ese rol de «4» suplente de Mirotic dependerá el acudir al mercado o no. Si a Jasikevicius se le queda corto no quedará más remedio que prescindir de él y buscar una alternativa, pero es un asunto complejo.

Por perfil el letón parece el suplente perfecto de Nikola Mirotic. Es un jugador sano con un físico que le respeta, disciplinado, buen defensor, intenso, con buena movilidad para la defensa de cambios, capaz de defender a todo tipo de interiores e incluso capaz de formar pareja con el montenegrino cuando el Barça requiere de más dinamismo en la pintura. Además él acepta de buen grado el rol de jugador de banquillo, está cómodo con el minutaje, es cupo y su salario no ha de ser muy elevado. Muchas ventajas si no se quiere aspirar a más, pero la cuestión es si en la dirección deportiva y en Saras existe la voluntad de generar un update en esa posición.

Si uno mira al gran rival observa que en la misma posición cuenta con Yabusele, Randolph y Thompkins, completando así un juego interior infinito contra el que tiene que competir el Barça con las mayores garantías. Y lo cierto es que Smits siempre ha estado a la altura en los enfrentamientos contra los de Laso, pero igual se busca algo más que eso.

Hablar de futuro en febrero y con todo en juego podría parecer precipitado, pero muchos movimientos se van cocinando a fuego lento desde meses atrás y lo responsable en una secretaría técnica sería contar ya con diversas opciones por si se deciden a hacer un relevo en ese «4» suplente.

¿Renovar o no a Rolands Smits?