Me vais a permitir la licencia de modificar el refrán ‘mucho remar para morir en la orilla’ en el título para explicar lo sucedido durante la victoria del Barça en Elche. Un partido en el que el equipo de Xavi Hernández fue justo vencedor ya que fue muy superior pero que esos tres puntos estuvieron en muchos momentos en peligro(sobretodo en la primera parte) por la falta de acierto en las áreas.

 

La más alarmante y que necesita una decisión importante por parte de Xavi es la portería. Ter Stegen confirma en cada partido que la primera ocasión clara, acaba en gol del rival. El portero alemán demuestra una falta de confianza y acierto en sus acciones que son anticompetitivas para un equipo que quiere luchar por puestos de Champions League y quiere alcanzar la segunda posición(actualmente a 7 puntos con un partido menos). Marc-André necesita un ‘reset’ y eso pasa por alejarlo del foco. Se beneficiaría él mismo y el equipo ya que calidad tiene y así lo demostró también en la segunda parte cuando salvó una ocasión clara que habría alejado la posibilidad de victoria en el Martínez Valero.

 

En cuanto a la línea defensiva, los dos centrales están demostrando un nivel de jerarquía y dominio del juego excepcionales. Sobre Gerard Piqué ya no descubrimos nada pero desde la llegada de Xavi esta volviendo a mostrarnos a ese central sin miedo de jugar lejos de su área. Pero el que está creciendo muchísimo es Ronald Araujo. Como central corrector ya había demostrado que es el mejor central que tenemos pero además ante el Elche demostró que puede ser importante a la hora de construir con conducciones que generaban superioridades. Pero es muy importante que ahora ambos centrales miran a los jugadores lejanos como primera opción y eso hace que los equipos rivales replieguen un paso más atrás y el Barça pueda construir mejor.

El jugador que si sufrió muchísimo en defensa fue Dani Alves. El lateral brasileño no ha podido dar continuidad en su juego a la hora de generar superioridades juntándose a Busquets en el centro del campo y, por contra, sufre mucho ante jugadores como Fidel que aglutinan mucho juego y son muy inteligentes agraviado si, encima, el equipo ilicitano cuenta con un lateral izquierdo tan dominante como Mojica. Desde esa banda llegó una ocasión clarísima por centro del lateral que acabó por arriba de la portería de Ter Stegen y en el gol, Fidel ganó la posición a Alves para definir la jugada tras error de Pedri.

 

En cuanto a generación de juego, el Barça de Xavi sigue dominando los partidos a base de posesión y de posición muy bien entendida. En la primera, por contra, tuvo muchos problemas a la hora de generar por banda izquierda ya que Gavi no se acaba de encontrar cómodo como falso extremo. No cierra bien para que le doble Jordi Alba y no consigue juntarse a Frenkie(que tampoco aparece en la base de ese costado para propiciarlo todo) y Pedri para tener más y mejor posición. Durante la primera parte el mayor peligro llegó a través de un Ousmane Dembelé que si conseguía ocupar bien su posición y podía recibir con ventaja en balones desde los centrales y aprovechando las incursiones en ataque de su lateral Mojica.

 

Sobre Ousmane Dembelé quiero hacer un punto aparte. Es un jugador al que beneficia más una hipotética renovación por el Barça, ya que con Xavi está siendo mejor jugador y con más continuidad que nunca en el club y aportando aspectos posicionales a su juego que no tenía, que al propio club ya que ahora mismo ofrece mejores prestaciones Adama como extremo titular que el francés que funciona como revulsivo(incluso Adama al salir ante el Elche fue más determinante ante Mojica y generó más peligro determinante que el francés). Pero claro, teniendo opciones en el B de mucha calidad junto a que pueda llegar en verano un ‘primer espada’ como Haaland que lleve a Ferran al extremo, es difícil verle encaje a Dembelé y mucho se tendría que bajar el sueldo para que entre en la escala salarial y no comprometer la renovación de la plantilla.

 

En la segunda parte, Xavi introdujo a Ferran Torres por Gavi para poder trabajar con dos extremos puros y poder hacer daño por las dos bandas. Y Ferran respondió. Fue el jugador que más peligro generó pero volvemos al punto inicial del artículo ya que, aunque empató a la altura de la hora de partido, desaprovechó ocasiones claras que nos hicieron sufrir para llevarnos la victoria.

Con la variante que introdujo Xavi con Ferran, el Barça atacó mucho mejor por las dos bandas y el Elche concedía más espacios y las ocasiones eran más claras. A todo esto se juntó Memphis Depay en sustitución de un Aubameyang que tuvo que jugar mucho más tiempo de espaldas a la portería y alejado de la portería rival y ahí el delantero gabonés sufre mucho y no es determinante.

 

Con todos estos cambios acertados por parte de Xavi, el Barça se estaba mereciendo que llegara el segundo gol que así fue en el minuto 84 gracias a un penalti magistralmente lanzado por Memphis. Una victoria que era muy importante cerrarla para afianzar la plaza de Champions ya que este fin de semana los resultados obtenidos beneficiaban al club azulgrana y mantener la moral alta de todo el equipo para seguir creyendo en los objetivos y el juego de todo el conjunto. Pero hoy, como decía al principio, estuvimos muchos minutos en el alambre de morir en la orilla después de dominar el juego durante todo el partido. En las áreas, Xavi tiene que tomar decisiones o que ciertos jugadores tomen consciencia que deben ser determinantes para seguir cosechando titularidades.