Empiezo estas líneas con la mayor de las tristezas instalada en mi cuerpo. Es el tercer aniversario que te escribo y sin duda es el más difícil, pero no podía no hacerlo. Te lo debo.

Tenía que contarte un montón de cosas, esas que te has perdido este año y que me encantaría comentar contigo. Ha sido un buen año barcelonísticamente hablando, mucho mejor de lo que todos esperábamos. Con el agua al cuello económicamente y con el Real Madrid habiéndolo ganado casi todo el año anterior la cosa pintaba muy mal, pero sin hacer una temporada brillante hemos ganado la Liga con suficiencia.

ter Stegen ha vuelto a su mejor nivel, Lewandowski ha sido un gran fichaje pese a su notorio bajón desde enero y todo se ha cimentado desde la defensa, principalmente. Te gustaría Balde, es un cohete. Xavi no apunta a ser un entrenador histórico ni un genio de los banquillos, pero por lo pronto ha ganado una Liga con la que no contábamos y se ha parado ese contador de años sin ganar un gran título que ya empezaba a pesar. Y bueno, se han marchado Piqué, Busquets y Alba y ya no queda nada del mejor Barça que recordamos.

Lo que más me gusta contarte es que por fin Leo lo consiguió. Ya es campeón del mundo. Ya tiene esa estrella que solo confirma lo que ya sabíamos, que es el mejor de la historia. Fue emocionante verle levantar la Copa y seguramente lo hubiera sido verle regresar a casa, pero no ha sucedido y quizá sea lo mejor.

Escribo estas cosas con pocas ganas porque en realidad todo esto me importa cero y por eso no sigo. Solo quería contarte que la batalla que inició mi madre contra la misma enfermedad que tú unos meses después de tu marcha también acabó con ella hace 8 días.

Simplemente agradecerte tu inspiración estos años de lucha. Te he tenido presente en este proceso permanentemente y estás últimas semanas tan duras me he acordado de ti todo el rato. Sin tu ejemplo todo hubiera sido aún peor. Mi admiración por ti y por tu gente se ha multiplicado.

Le he hablado de ti a mi madre todo este tiempo. Yo no creo o no tengo creencias firmes sobre el más allá y esas cosas, pero si eso existe y os encontráis acércate y preséntate como Dani, el colega asturiano de Arturo. Ella te conoce de sobra. Tú a ella no, pero te la presento: la mejor madre del mundo.

Se te echa de menos, amigo. En Rondo, en Twitter, en el barcelonismo y en cualquier sitio que hayas echado un ratito. Porque te lo digo siempre, pero has dejado huella allá donde has ido. Y siempre, siempre, siempre GRACIAS.