La cantera donde quiera Setién

@ivanofde

 

Como ante todo cambio que se produce en los equipos, la esperanza, la novedad inunda al aficionado, nuevas cosas, nuevas formas de proceder, una cara nueva. En este caso, Setién era una cara “conocida” que deseábamos algunos seguir conociendo, poder intimar, y bueno, ya está aquí, es hora de nuestros mejores galas

Sin embargo, como en toda relación hijos, la pareja debe quererlos a ellos y luego a nosotros. Esto en el futbol profesional no suele cumplirse, pero aquí, la situación es diferente, o al menos, debería de serlo.

 

El inicio de la relación

 

Setién se presentó ante el Camp Nou con un novedoso “estilo” o disposición de jugadores. A reseñar, la posición de falso tercer central de SergiRo o el uso de Ansu como extremo diestro a pie natural. No obstante, esto no es un artículo para analizar a el partido vs Granada, sino para poder poner en contexto lo que puede encontrarse los chavales de la cantera, al menos los que quizás sí podrían dar el salto.

 

Carles Pérez

 

Aunque el extremo de Granollers es ya a todos los efectos jugador del primer equipo, casi que se le puede considerar un canterano recién ascendido, sus inicios tras un enorme campaña 18/19 a las órdenes de Pimienta. Lo que es Carles, no lo voy a describir en manera profunda ya que ya lo hice en su momento aquí .

Lo que sí es reseñable, es lo que le puede llegar a aportar al nuevo entrenador. Si se mantiene en el lateral derecho ese rol de tercer central en salida de balón y falso interior en ataque posicional, Carles puede sacar a relucir gran parte de su potencial actuando de extremo derecho haciendo lo que posiblemente se le pida, que es ensanchar la zona de campo opuesta a donde el mismo rol lo hace un lateral.

Desde ahí, se mantiene fijado y es paciente, sin esa necesidad de buscar el balón, de necesitar activarse a través del esférico. Una vez reciba, pese a que desde el regate no tenga la autonomía de Ousmane, si te va a permitir retener el balón, fijar a su “pareja” y soltar en el momento requerido. Una vez suelte el balón, su activación es inmediata, siendo muy aprovechable sus desmarques semi circulares a la espalda rival.

Además, estar en el lado “débil”, sus recepciones van  ser bastante más limpias y liberadas que en el lado contrario. Desde este contexto, su regate exterior puede salir a relucir bastantes veces, empujando al rival hacia su portería. Un detalle a comentar, aunque no estemos viéndolo en el primer equipo, es que al estar en banda derecha, su percepción de los espacios para ganar segundas jugadas es bastante bueno, algo que podría ayudar a SergiRo en mejorar las transiciones defensivas.

 

Ansu Fati

 

El rol y desempeño del joven extremo fue visto por todos el domingo pasado. Pese a que no es su zona de mayor techo, lo hizo bastante bien. Su juego tiene interiorizado los aspectos más sacrificados del propio fútbol, esperar y activarse aunque la jugada esté lejos.

El jugar a pie natural le va a impedir pesar más por dentro de lo que a él le gustaría, y su jugada y fútbol favorito se van a reducir, pero aún así, sus movimientos no va a apagarse del todo. Espera, atrae, suelta y se va, no con la armonía y, en especial, peligro que en la banda contraria, pero es un recurso bastante potente.

Si se le requiriese en banda izquierda, sus prestaciones aumentaría, ya que es capaz de ejercer todo lo anterior, pero optimizado. El juego de Ansu pesa en el centro, pero se inicia en banda, al menos en esta fase de desarrollo. Otra zona donde Fati podría jugar, aunque haya tenido muy poco recorrido aún (Victor Valdés ya lo usó ahí) es en la punta o doble punta que Quique podría generar, ya que su sensibilidad para ir al espacio  rematar es bastante más alto al promedio de las promesas de élite del fútbol, incluso de jugadores ya maduros

 

Riqui Puig

 

Sé que os gusta el mediano interior, así que lo he dejado para el final. Riqui, ese rayo de esperanza en poder ver al fin un interior criado en la Masía tras tanto tiempo sin ello. Ya en el primer partido del nuevo entrenador dejó constancia de lo que es capaz, aunque pueda hacer bastante más.

Desde ese interior izquierdo, Riqui puede hacer no solo de mediocampista, también de extremo por el centro. La conducción y el regate es meteórico, veloz como pocos jugadores de élite pudieran hacer en esas zonas. Con lo que vimos de Quique y lo que hemos estado viendo con Pimienta, si en el primer equipo se quiere liberar a Griezman de la banda y proyectar lo más arriba posible a Jordi, Riqui puede hacer la del filial en salida de balón, venir abajo a recibir en banda izquierda. Desde ahí, si tiene campo y espacio (incluso sin él) es capaz de generar carreras que rajen al equipo rival, desde fuera hacia dentro, la visual perfecta para poder abrazar a Messi.

Por otro lado, su juego interior y entre líneas es bastante potente, ya que sus giros son rápidos y fluidos. Aquí debe mejorar aún ciertas manías como esperar demasiado el balón o no terminar de proteger bien el balón de espaldas. Aún así, Riqui tiene una visión impresionante del juego, siendo capaz no solo de ver a los alejados (en especial a los de su banda contraria) sino también para esperar, pausar y girar el juego al lado contrario donde se está empezando a generar una amenaza (muy común la jugada donde Riqui tiene de cara un desmarque, lo evita, se gira, se para y pasa el balón al lado contrario).

 

Tres no son multitud, más, tampoco

 

Se ha descrito en el artículo los 3 jugadores que posiblemente tengan mayor peso en el primer equipo, al menos en el corto plazo, sin embargo, la cantera del FCB es una mina (esperemos) inagotable de talento.

Y como he dicho, no solo están ellos, hay más que quizás se irán describiendo a lo largo de la temporada si van entrando en dinámica. Collado, Monchu, Araujo e incluso Morer podrían entrar en la dinámica si el contexto se lo permitiese.

La masía, esa gallina de los huevos de oro que tan solo necesitan la oportunidad no solo de demostrarlo, sino de demostrar que tras un fracaso, tienen suficiente calidad como para recomponerse y triunfar.