Messi, Luis Suárez y Neymar. Esa es la delantera soñada por todos los barcelonistas y la que la lógica, por la calidad de los integrantes, indica que será la titular en los momentos decisivos de la temporada. ¿Y Pedro?. Al canario se le adivina una temporada con un rol secundario, a la sombra de los 3 cracks, trabajando para ser alternativa a cualquiera de ellos e intentando aprovechar sus oportunidades.

Este rol no es nuevo para el delantero canario, hace un año también partía por detrás de Neymar, Messi y Alexis pero las lesiones de unos y otros hicieron que el ‘7’ gozara de bastantes minutos a lo largo de la temporada, aunque en los momentos decisivos de la misma su sitio fue el banquillo. Sus mejores actuaciones fueron en banda izquierda y parece que en los planes de Lucho, a tenor de lo visto contra Elche y Villarreal, seguirá partiendo de la banda. En principio es una posición conocida para el canario ya que desde ahí mostró sus mejores maneras en la selección de Del Bosque y como decíamos antes vimos su mejor rostro la temporada pasada. Zona conocida, pero distintas funciones a desempeñar, ya que Luis Enrique exige a sus extremos un comportamiento diferente al que pedían Martino, Tito o Del Bosque. Los extremos del entrenador asturiano en la práctica juegan como delanteros, por dentro, con Messi de vértice en la mediapunta. Y de momento, sin poder sacar ninguna conclusión definitiva, no hemos visto a Pedro cómodo en ese rol en los dos partidos disputados hasta la fecha.
En el debut liguero ante el Elche unos problemas estomacales hicieron que el canario fuese duda hasta última hora. Salió en la segunda parte sustituyendo a Munir en el minuto 65 y quizá por el momento de la temporada en que estamos vimos a un Pedro fallón, que marró dos claras ocasiones.
En la segunda jornada ante el Villarreal Pedro fue de la partida junto a Messi y Munir y seguimos viendo una versión muy pobre del internacional español, poco participativo, sin asociarse con Leo y que sólo pudo gozar de una ocasión de gol. El equipo mejoró cuando Neymar saltó al terreno de juego para ser el socio de Leo. Minutos después Sandro sustituyó al canario y también sumó con sus movimientos por delante del argentino y del brasileño. De momento podemos intuir que Lucho busca en los acompañantes de Messi que uno de ellos sea apoyo del argentino y el otro agitación y movimiento por delante y hasta el momento Pedro no ha sido capaz de mostrar su mejor nivel en ninguno de los dos roles.

Pedro Rodríguez debe de dar un paso al frente ya que con la llegada de Luis Suárez el estar en el XI titular está muy caro y por detrás otros 3 canteranos como Munir, Sandro o Rafinha aprietan para disfrutar de minutos. Este debe de ser un año clave para un Pedro que termina contrato en 2016 y al que el club declaró intransferible puesto que el entrenador confía en él como un argumento a sumar, no en vano la temporada pasada marcó 19 goles de azulgrana. Con 3 cracks mundiales en su puesto y canteranos con el intermitente puesto, el canario tiene un grandísimo reto por delante, el de ser importante en el nuevo Barça de Luis Enrique. Mientras el barcelonista quiere que Pedro cambie el diésel de las últimas temporadas por la gasolina con octanaje pesado de los mejores años de Pep, aquellos en que Pedrito, pasó a ser el Don Pedro de todos culés.