Aitana Bonmatí no tiene quien la recuerde

Aitana Bonmatí ya es titular indiscutible en el Barça femení. Su talento y su crecimiento físico y futbolístico se impusieron por su propio peso y se ha asentado desde la pasada temporada en el once de gala del Barcelona. Pero hasta ahora siempre se ha visto opacada por figuras como la de Jenni Hermoso arriba o la de Alexia como capitana y símbolo de la idea y del proyecto y no ha tenido tampoco el reconocimiento mediático ni del entorno del fútbol femenino para reconocer su valía y su presente y futuro tan prometedor como el suyo.

A pesar de ser la MVP de la pasada final de la UWCL contra el Chelsea y de marcar uno de los goles en el partido decisivo no se ha visto reconocido su talento a la hora de evaluar su nivel de cara a los premios del Balón de oro, donde se ha visto ausente en una lista de 20 jugadoras de las cuales muy pocas son mejores que ella.

Como todo tiene su contexto y su porqué hay que decir que a pesar del gran rendimiento la pasada temporada y al comienzo de ésta no era indiscutible en los sistemas de Lluís Cortés. En su momento las figuras de Vicky Losada, Alexia o la llegada de Oshoala o Jenni la dejaban fuera de un once de gala. ¿Fue inusto o fue un error? No tendría porque ser así, pues la centrocampista catalana tenía delante suyo mucho talento y la figura de Jenni Hermoso y Oshoala permitía dotar a la madrileña un rol perfecto para desarrollar su fútbol y la presencia de Patri Guijarro o de Kheira  Hamraoui en el pivote más Alexia cubrían los puestos en el centro del campo con Mariona o Martens en derecha y Hansen por la izquierda cerraban un once que ya era aspirante a casi todo.

Iniesta como símil

A nivel futbolístico, aunque desde aquí no me guste hacer comparaciones odiosas por ser tan diferentes los contextos entre el fútbol masculino y femenino, Aitana Bonmatí sería lo más parecido a lo que llegó a ser Iniesta en su momento. Siempre tuvo una especie de figura que se llevaba los focos en el centro del campo como fue Xavi, que además llegó a ser el capitán del equipo y del club como lo es ahora Alexia Putellas, y por su juventud (tiene apenas 23 años) lleva relativamente poco en la élite y le falta aún añadir alguna foto mediática con la selección española para asentarse definitivamente en esos nombramientos y reconocimientos mediáticos que su fútbol merece.

Ahora sólo faltará que el fútbol español tenga liga y permita que los focos se dirijan hacia aquí y que la vean jugar. El talento ya lo tiene, el rendimiento ya está aquí y su fútbol y su jerarquía ya pesan por los campos de Europa como lo que, es una de las mejores futbolistas del mundo.