SUEÑO DE UNA NOCHE DE VERANO

Mi hijo no es del Barça por su padre, lo es porque nació con Messi formando parte de este club y es difícil no querer disfrutar cada día del mejor. Pero tranquilos, este no es un artículo más de Leo, pero sí de la ilusión de un niño, de unos “niños” en este caso, que empiezan a convertir su sueño en realidad.

Raro es el verano donde el aficionado de cualquier club, no se motive con esa nueva hornada que llega de las categorías inferiores, empezando a imaginar que este o aquel chaval, llenará de estrellas y momentos mágicos, el futuro más inmediato del club de sus amores. Y esta pretemporada no ha sido una excepción; los Gavi, Nico González y Yusuf Demir, aunque este último venga de otro club, han vuelto a generar sueños húmedos en el fan que sigue al equipo hasta en los entrenamientos.

Cuando vemos a un crío en el primer equipo, intentamos proyectar qué será de ese chaval en unos años, si tiene hueco o mejor dicho, si se hará hueco con los mayores o si, por el contrario, su sueño de jugar en el Barça será tan fugaz como una noche de verano.

Con los tres que vemos más arriba las sensaciones no pueden ser mejores. Nos podemos quedar con comentarios sobre ellos que hace el ex-entrenador del Juvenil A, Franc Artiga, indicando sobre Pablo Martín Paez Gavira que es un animal competitivo, con una cabeza muy rápida y que es talento puro. Y en el caso de Nico González, que es muy inteligente y físicamente una bestia. Pero aunque sintomática esta opinión, estos jugadores son mucho más que eso.

El primero, Gavi, que lleva en las categorías inferiores más de cinco años, aunque no se puede negar su origen bético, pues comenzó en las categorías del club sevillano. Tiene el deje y la comprensión del fútbol de la masía. Ese sello de fábrica que tanto gusta de identificar el aficionado medio para, a su vez, identificarse con el propio futbolista. Carta de presentación: ha pasado por la derecha a una de las perlas de la masía como Riqui Puig.

Cuerpo por hacer, como suele pasar con la mayoría de ellos, pero cabeza ya lo suficientemente amueblada como para parecerte imposible que su DNI marque que nació en el 2004. Uno de esos interiores marca de la casa, que se relacionan especialmente bien con la pelota, el espacio y el tiempo, digno sucesor de los Xavi, Iniesta y compañía. Llegará, si no lo ha hecho ya.

El segundo sería “el hijo de Fran”, Nico González, que pronto dejará de ser “el hijo de” y su padre empezará a ser “el papá de Nico”. Esta vez sí. Esta vez sí que parece que hemos encontrado al sucesor de Busi, que no sabíamos si se jubilaría algún día. Será el “cuatro” más pronto que tarde, y eso ya es decir mucho, convirtiéndose en el vértice clave sobre el que gira todo el fútbol del Barça de los últimos veinte años. Cabeza no exenta de músculo para esa posición tan especial.

Para el final, pero no por eso menos importante, dejamos a Yusuf Demir. Un indicativo más que este club lo está haciendo muy bien a la hora de traerse foráneos jóvenes, con una proyección de triunfar en el primer equipo, una vez a todos nos viene a la cabeza un chaval canario que va a marcar época en el fútbol español. Sí, como ya sabéis, nos referimos a un tal Pedri.

Solo decir que del austriaco sus compañeros de entrenamiento dicen que les recuerda a Leo en la conducción, con eso podría estar todo dicho. Pero no nos quedemos con el detalle, profundicemos un poco más aunque solo sea en base a sensaciones; conoce el juego, y eso es y siempre será, lo mejor que se puede decir de estos futbolistas que empiezan. Lo demás lo irá dictando la experiencia. De momento hace que Collado, del que todo el que seguía el B indicaba que acabaría siendo del primer equipo, esté buscando un equipo al que ir cedido pues ya tiene la puerta bloqueada por el austriaco.

Y nos dejamos a los Dest, Araujo, Ansu, Eric García, Balde y el ya mencionado Pedri… signos inequívocos que los jóvenes vienen fuertes por detrás. Muchos de ellos “contaminados” por otros clubs, otras maneras de entender el fútbol, diferente a lo que maman los que nacen en la Masía, pero de esa mezcla probablemente nazca buena parte de la fuerza con la que se pronuncian en el césped estas estrellas en ciernes.

Ya no tendrán la referencia del profesor, del mejor de la historia. Pura terapia de choque, un impacto brutal en nuestra vidas, pero que en las de estos jóvenes que empiezan, no debería asustarles tanto ese salto al vació. Ventajas de la inconsciencia de la juventud. Hagamos la lectura positiva; esto les obligará a dar el paso adelante más pronto que tarde. Algo beneficioso tenía que tener…