A pesar de la marcha de Delaney una de las dudas que planteaba el Barça de cara al debut en este formato de ACB era la distribución de minutos en el base, pues estos tres meses de parón habían dado tiempo a Heurtel y Pangos para recuperarse, pudiendo volver Hanga a su puesto natural. Eso decía una de las lógicas, pero la otra decía que Pesic confiaría la manija al jugador que había dirigido toda la temporada, y eso es lo que ocurrió. El magiar justificó la confianza de su técnico.

Sufrió en exceso el Barça en un partido donde mostró dos caras, con un contraste preocupante entre titulares y segunda unidad. Debió ser un partido tranquilo, sobre todo tras un comienzo donde parecía más un duelo entre seniors y juveniles, pero se relajó dos veces el Barça y la Penya acabó creyéndoselo. Es difícil sacar lecturas por ser el primer partido en estas condiciones y por cómo se dio el choque, pero sí hubo detalles a destacar.

Esa línea exterior Hanga-Higgins-Claver es una trituradora. Con ellos en pista el Barça es otro, sobre todo si como ayer además están ciertamente inspirados, pero defensivamente maltratan a los rivales y sostienen por dentro a la pareja de balcanicos, mucho más laxos en tareas defensivas. Con ellos sí puede llegar a compensar esas ayudas tan largas que suelen acabar en sangría en forma de triples. Cuando se sentaron el Barça dejó de ser un equipo competitivo, y al volver a cancha el equipo recuperó la madurez.

Hanga demostró que es el base titular del equipo a falta de ver a Heurtel, descartado por decisión técnica. Le acompañaron en el «1» Pangos y Bolmaro. Muy precipitado el argentino, sobre todo en la 1ª parte, mientras que al canadiense sí se le vio mejor (último minuto al margen). Parece que haga lo que haga su historia con el Barça va a finalizar en esta rara ACB, pero si las lesiones le respetan el equipo que se haga con sus servicios se llevará un muy buen base. Si como se rumorea acaba en Valencia hablaríamos de una operación redonda para las dos partes, pues encaja mejor que bien.

De entre todos los suplentes el que peor estuvo fue sin duda Brandon Davies, que en sus primeros dos minutos y medio en pista cometió tres faltas personales. En su aparición en la 2ª parte estuvo algo mejor, pero fue preocupante hasta su expresión corporal. Apagado, reducido e incluso abatido. Cuando no le salen las cosas es un peligro para su propio equipo, y en días como ayer restó. Importante que desconecte de esta mala actuación y se enchufe. Sin hacer nada del otro mundo Tomic le mejoró por mucho a pesar de lo mal que estuvo en el rebote defensivo. Mereció minutos en la 2ª mitad Artem Pustovyi, que en los pocos que gozó en la 1ª tuvo cierta producción, como casi siempre. Viendo los problemas en el «5» se hace incomprensible que Pesic no le dé algo más de bola al ucraniano.

Es una pena la sensación tan agridulce con la que acabó el partido el Barça, pues era un encuentro para ganar en confianza. El equipo tuvo muy buenos minutos, moviendo muy bien el balón (25 asistencias) y pudiendo finiquitarlo sin el sufrimiento innecesario del final, pero en cambio lo acabó con dudas, encajando 60 puntos en los segundos 20 minutos y cediendo ante el descaro del equipo de Badalona. En dos días Unicaja, un equipo que le metió a los de Pesic 105 puntos en el Palau.